El que menos pensé || Christopher Velez #EQMP1

Cap 2 ®

Ana POV

Cuando las encontramos las encendimos y las pusimos por toda la casa. Al salir de su habitación tropecé y caí encima de él, nuestros rostros estaban muy cerca, demasiado diría yo.

Se apego más a mi intentando pegar nuestros labios pero un impulso me hizo girar mi cara y acabo besando mi mejilla mientras esta se ponía roja.

Se levanto algo avergonzado sin decir nada. Cuando me levante yo alce mi rostro y me di cuenta de que Christopher ya no se encontraba a mi lado, la casa era grande y sin un guía me iba a perder.

Camine por el pasillo hasta una puerta roja, entre y ahí se encontraba una mesa con un cofre en ella. Me acerque y abrí el cofre, al ver el contenido se me cortó el aire. Era...tan parecida a la mia, alguien golpeo la puerta y lo puse de nuevo en su sitio.

-Está prohibido entrar aquí - Christopher abrio la puerta indicandome que saliera en ese mismo instante.

Él se encontraba detrás mía y aunque estabamos callados sabía que se estaría preguntando por que demonios no lo bese, mordí mi labio intentando imaginar como hubiera sido aquel beso, ¿hubiera sido un beso dulce o apasionado?

Entramos al salón que se iluminaba por tres velas, tenía que llamar a mi madre y dejar de pensar en el no beso entre él y yo, me senté y él me dio su móvil para llamar a mi madre.

Llamada telefónica

-Mamá - dije cuando cogió la llamada.
-¿Que pasa hija? - pregunto tranquilamente.
-Es que como esta lloviendo tanto no podré ir a casa y estoy en la casa de un amigo - solté un suspiro.
-¿De Marcos? - pregunto, seguramente piensa que mi único amigo chico es él.
-No mamá, mi amigo se llama Christopher - le explique, se escucho su respiración hasta que volvió hablar de nuevo.
-A ese chico no le conozco, que tal si es un secuestrador - suelte un carcajada ante la ocurrencia de mi madre aunque después de ver...eso sabía que su familia no era la mejor de todas. 
-No mamá, va a mi clase y se sienta a mi lado, no es un secuestrador - rodé los ojos.
-Bueno recuerda mañana vas al instituto y cuando acabe vienes directito a casa - me ordenó, yo hice una mueca.
-Esta bien mamá, adiós - dije con desánimo.
-Adiós, hija y cuidate - y así colgó.

Le entregue el teléfono y me senté a ver como seguía lloviendo, note una mano en mi hombro y me giré para ver bien su rostro.

-Ana en cuanto lo de antes, lo siento, me deje llevar por el momento, fue un error - no se pero eso de que me dijera que fue un error provocó algo en mi, algo que no siento desde hace tiempo.
-Ah, no te preocupes - volví mi vista de nuevo a la ventana hasta que me volvió a sacar de mis pensamientos.
-¿Que quieres para comer? - ni siquiera le mire, me sentía ofendida.
-Si no hay luz no podemos cocinar - dije obvia
-Es verdad, se me había olvidado - note algo de nervios en su voz.
-Tonto - rodé los ojos y me acosté en el sillón.
-Pues nos dormiremos y ya esta - se acostó encima mio y la verdad estaba muy incomoda.
-Bájate, me aplastas - me revolví para quitarle pero no podía.
-Nop y estate quieta - me agarró las manos y las puso encima de mi cabeza.
-Suelta me, me haces daño - volví a intentar quitarle pero seguía sin poder hacerlo.
-Hasta que no te estés quieta no te voy a soltar - nuestras miradas se encontraron y me perdí en sus ojos marrones.
-Eso lo veremos - con un giro me posicione encima de él.
-Eso no se vale, yo quiero estar encima de ti - lo mal pensé demasiado por lo que me puse algo nerviosa.
-Y ahora si me perdonas tengo que ir al baño - me sente encima de él para después levantarme.