Adorable Acosadora [M.Yoongi]

-Maquillista Personal-

— ¡Hye! —Gritó Jisoo euforica al otro lado de la línea.

La castaña tuvo que alejarse el teléfono del oído ya que el grito de su amiga se pudo oír hasta Corea del Norte, más o menos.

— Jisoo, cuantas veces te dije que no grites mi nombre —Protestó llevandose una manzana a la boca.

Se encontraba sentada en la barra de la cocina. Hoy había sido un día tranquilo, era sabado y Hye no tenía mejor cosa que hacer así que decidió preparar un pastel de chocolate. Ya habían pasado treinta minutos exactos y Hye ya se había acavado todo el pastel, sola.

Su casa estaba en un cilencio casi sepulcral ya que su madre había salido de compras con el señor Kim y Taehyung habia salido a tomar aire, bueno si ir a un parque cercano a jugar con los niños se concideraba tomar aire.

Tomó impulso en sus pies y saltó para sentarse en la improvisada barra de la cocina. Había estado hablando con Jisoo por mensaje hasta que se le ocurrio hacer una
video-llamada, pero como  la pelinegra -Jisoo- había estado jugando con su camara horas antes, el lente de esta estaba partido a la mitad, dando a conocer una gran línea de arriba a abajo.

— No puedo creer que rompieras esa cosa...—Comentó Hye riendo de la desgracia de su amiga.

Ya estaba acostumbrada a las tonterías de su amiga.

— Si, tampoco lo creo, mi madre me castígará por dos semanas si se entera.

Las dos rieron al unisono.

— Oh, se me olvida, Hye, Nayeon dará una fiesta de despedída, esta noche en el 'HeartBraker' ¿irás?.

Hye lo pensó un momento, tal vez era la oportunidad perfecta para llevar a cabo el no tan elavorado plan de Taehyung, si iba a esa fiesta debía dar una buena impresión.

Además hacia días que no salía de casa, a menos que fuera para comprar comida o la escuela, podría matar a dos pajaros de un tiro –oh, eso suena cruel– aprovecharía para darse un respiro y para ver a Yoongi.

— ¿Qué dices? —Cuestionó la pelinegra al otro lado de la línea esperando la anciada respuesta.

— Si, iré.

— Muy bien, paso por tí a las ocho, besos perra.

— Adiós yo tambíen te quiero.

******-******

— Pium, pium ¡muere! —Gritaba Taehyung con una pistola falsa de color rosa.

Lastima que sus gritos habían espantado a todos los niños, había preparado su arma "especial" para jugar con ellos.

I scream, you scream
Give me that, give me that
Give me that ice cream....

— ¿Hola...?

— TaeTae necesito tu ayuda, hoy tendré una fiesta, en la noche, necesitamos ropa, brillo, maquillaje, a la fuerza armada, TaeTae necesito tu ayuda.

— Claro Hye, ya voy de camino a casa, solo esperame en la puerta.

— Voltea.

Se volteó y definitivamente Hye se encontraba en una banca de el parque sonriendo con su teléfono en su oído.

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— ¿Ese?

— Nope.

— Tal vez este, se verá lin..

— Definitivamente nope.

— Oh, este está muy lindo es de color negro...

— No me gusta el negro.

— Oh, pues te jodes, está muy bonito, si fuera una niña ya lo hubiera usado...— Meneó sus caderas con el vestido.

— Pues llevalo y ponte una peluca...—Contestó mirando la pantalla de su celular.

Ya estaba harta de buscar en todas las tiendas un misero vestido o conjunto de su agrado. Habían cosas bonitas pero no llamaban demaciado su atención. Solo buscaría un suerter, unos jeans y los combinaría con sus converses blancas. Tal vez el plan de "cambio" no estaba funcionando a la perfección, sin embargo no era hora de hecharse para atrás y dejar que Seulgi se quedara con su preciado Oppa.

— ¡Oh my god! —Chilló de sorpresa cuando su vista se clavó en un lindo sueter color rosa chillón con un diseño de panda en la parte central.

— Me encanta...—Tomó la prenda y entró al provador.

Al salir, le encantó, ya que le quedaba a la perfección con sus jeans negros y sus vans celestes.

— Es muy lindo...—Habló Taehyung poniendo su mentón en la palma de su mano.

La miró de arriba a abajo muchas veces, y cuando estaba satisfecho por la elección de Hye sonrió y asintió tendiendole el dinero para su compra.

El plan de Taehyung era salir de allí con cientos de bolsas de ropa, calzado o maquillaje, pero sus pensamientos se vieron frustrados cuando solo traían una bolsa con un sueter y otra con un vestido de color negro.

Y si, Taehyung obligó a Hye a comprarlo con la excusa de que podía sacarla de apuros.

— ¿Vamos a comer? —Preguntó el mayor de los dos y Hye solo asintió.

Su estomago estaba rujiendo y si no le daba algo para callarse, juraba que algo saldría.

**********

— ¿Ya? —Preguntó Taehyung al otro lado de la puerta.

— ¡No! ¡No se maquillarme! —Abrió la puerta dejandl ver a Hye con el labial corrido, la mascara de pestañas en en borde de su ojo y la sombra esparcida por sus mejillas.

Parecía una mujer recien divorciada.

— Oh, no hay tiempo, ven aquí...—Tomó a la castaña por los hombros y la sentó en su tocador.

Tomó unas toallitas desmaquillantes y las pasó suavemente por su rostro, mientras hablaba como si fuera en un tutorial de belleza. Luego tomó la sombra rosa y la pasó suavemente por sus ojos para luego disfuminarla, tomó la mascara y las pasó por sus largas pestañas dejandola perfecta.

— Creo que ahora se tu lado oscuro TaeTae...—Expresó sorprendida por su obra.

— No se lo menciones a nadie....oh falta algo, espera aquí —Salió corriendo de la habitación.

Al volver, como la cereza del pastel, entre sus manos traía un labial rojo pasion.

Lo esparció sobre sus labios y sonrió satisfecho.

— ¿Por qué tienes un labial en tu habitación?

— Eh...¡no te metaz en miz azuntoz Hye!

En serio que Taehyung era raro, pero tenía sus encantos.

[💅]