2.

8.5K 634 370
                                    


— ¿EN QUE PIENSAS? -Los gritos agudos de Chenle interrumpieron mis pensamientos.

— En que KyungMi es muy pequeña para usar tanto maquillaje.. -dije riendo.

— Pero.. Tenemos su misma edad.. -Jeeny me miró raro.

— Ese es el punto, nosotras no usamos maquillaje -Vi al pequeño rubio del grupo caminar hacía nosotros- Oh, ahí está Jisung.

Nuestro pequeño niño Park Jisung, otro de mis mejores amigos, él es muy tímido y temeroso, pero da mucha ternura. Es un año menor, aún así no tenemos problema en ser sus amigos y cuidarlo como si fuera nuestro bebé al mismo tiempo.

— Hola chicos, perdón por tardar, mi madre vino a la escuela -Habló él sentándose, su voz era baja.

— ¿Paso algo? -Chenle apoyó la mano en su hombro.

— No, no paso nada, en verdad vino por lo del otro día, cuando me golpearon.

— Pobre e inocente niñito -Jeeny habló exagerada.

— ¿Por qué alguien golpearía al tierno e inofensivo Park Jisung?

Ambas estábamos hablando dramáticas, los cuatro reímos, para luego seguir comiendo.
El timbre sonó después de terminar el almuerzo y nosotros nos fuimos a el salón de clases.

— ¿Jeonie? ¿Qué estás haciendo?

— Es que.. la falda.. ¡AH! ¡Es muy corta! -gritaba bajando la falda de mi uniforme- ¡No me gusta esto!

Jisung caminó riendo hasta su salón, mientras que nosotros -dirigiéndonos al nuestro también- estábamos riendo por lo de mi falda.
En clase no paraban de tirarme bolitas de papel y cuando volteé a ver era Mark, Donghyuck y el idiota de Jaemin, en mi cabello se habían quedado algunos y no dudé en quitarlos, aún los miraba.

— Oh.. -se hizo el inocente- ¡Profesora! Heemin no está prestando atención, hay examen la otra semana y ella no sabe nada de la clase.

Lo mire mal y la profesora me regaño haciendo que todos rieran, menos yo y mis amigos.
Al sonar el timbre que avisaba el segundo receso todos salieron menos yo. Mis tres amigos se acercaron preocupados.

— ¿Estás bien, Noona? -Preguntó dulcemente Jisung.

— Definitivamente odio a Jaemin.

— Tranquila, quizás lo hizo por que lo obligaron Mark y Haechan.. Donghyuck. -dijo el chino, corrigiendo al final el nombre del último chico.

— No, en mi casa hizo algo parecido, pero con mi madre.

— Oh.. es un pendejo.. -Jeeny parecía enojada, no solía hablar de esa manera.

[...]

Al terminar el horario escolar me fui a casa, obviamente Jaemin iba conmigo en el bus, pero lo ignoré todo el camino.
Esta vez me encerré en mi habitación sin dejar que él me diga una sola palabra. Hice mi tarea y sorprendentemente no me dormí en el intento, no era mala en la escuela pero la asignatura me aburría intensamente.

Por primera vez tomé aquel diario que mi abuela me había regalado por mí cumpleaños y comencé a escribir.

"Odiarte es poco, Jaemin.."

Así había sido la última frase que escribí, estaba tan harta de él y a penas había llegado hace tan pocos días.

Hay veces donde los años pasan y sientes que todo ha sido igual, todas las veces seguí escribiendo sobre este papel, todos los días viendo la cara de Jaemin pudriéndome la existencia, bromas, insultos, ¿Llegaron a odiar tanto a una persona que preferían irse vivir del otro lado del mundo incomunicada para no volverlo a ver? Yo sí.
Todas las veces que escribía la misma frase se repetía en mi cabeza y en la escritura "Odiarte es poco, Jaemin".
Siendo guapo o no, él era lo peor que conocí, pero a veces las cosas cambian, a veces lo miraba sin darme cuenta, pero para mí era solo porque lo intentaba matar con la mirasa

4 años más tarde..

Me levanté lentamente y miré el reloj de mi celular -7:30, iba tarde- estaba a punto de correr fuera de mi cama, pero me di cuenta de una cosa, era sábado. Suspiré y me volví a recostar.

¿Jaemin y yo? Nos odiabamos a muerte.
Creo que está guerra no acabará hasta que alguno de rinda o él se vaya, yo no me voy a rendir y poco creo que él se mude de mi casa por un largo tiempo.

Él se ha vuelto popular y yo soy el punto de burla ahora, pase de ser la que casi nadie nota a ser a la que notan para molestar, -¡Genial!- todo gracias a él y los impulsos de Mark y Donghyuck.

Giré un poco en la cama para mirar hacia el techo pensando en mañana,
sería mi cumpleaños, mis quince años y en la mañana Jeeny me llevaría pasear.
Giré otra vez y me hice bolita para volver a dormí, demasiado temprano y era un día sábado así que era mejor descansar un poco más.

Desperté por el sonido de unas risas así que salí de mi habitación, si, en pijama, de todos modos mi pijama era un short negro de tela con una camiseta larga hasta varios centímetros más alta que mis rodillas ¿Quién me vería?
Bajé y vi al pasar por la sala a Mark, Donghyuck y Jaemin jugando videojuegos, los ignoré por completo y fui a la cocina que era la habitación que estaba al lado de la sala.

Sentí tres pares de ojos siguiéndome con la mirada aun que no le di importancia, hasta que oí algo.

— Nunca había visto así a Heemin -esa era la voz de Mark.

—Tsk.. -Jaemin al parecer, idiota.

— Bueno, no es nada fea.. es muy linda -Y ahí estaba Donghyuck, siempre siendo el más directo.

— Solo jueguen y no sean idiotas -Jaemin parecía enojado y Mark intentó hablar otra vez, pero en lugar de eso escuché a Jaemin callarlo- ¡Cierra la boca!

Intente guardarme la risa pero no pude, fue tan divertido oír a Mark y Donghyuck diciendo ese tipo de estupideces.
Seguí riendo mientras colocaba pan en el tostador, no podía parar.

"No es nada fea, es muy linda".

Volví a carcajear después de repetir las palabras de aquel chico apodado como Haechan -tenía mis razones para no llamarlo así- y intentando recuperar mi aire para poder tomar mi desayuno e irme. Salí de la cocina con unas cuantas tostadas y una taza de leche con chocolate, volvieron a mirarme y yo igual lo hice para luego parar en seco.

...

Odiarte es poco | Na Jaemin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora