Kill The Lights [Depravity Falls] ||Segunda Temporada||

18 (Final)

   La casa estaba hecha ruinas, ellos apenas habían sobrevivido -o al menos tres de ellos- y estaban ansiosos por matar al que sabían era el responsable.

   Era media noche y Jackson, Comet y Sally portaban peculiares trajes que habían confeccionado a base de ropas viejas de sus padres. Caminaban hacia donde su informante les había dicho que se encontraba su víctima, querían ir corriendo pero debían mantener un perfil bajo para que él no llegara a darse cuenta de que lo perseguían.

—¿Ya estamos cerca?.— preguntó la peliblanca.

—Bastante cerca, pero no debemos alterarnos, no sabemos si los secuaces de Christen están vigilando o algo.— respondió Jackson.

   Al llegar al cementerio pudieron diferenciar del resto las tumbas de sus familiares. Phill, Jack, Mabel, todos estaban enterrados cerca uno del otro. Sintieron la sangre hervir al ver nuevamente la inscripción en sus tumbas: "amados por su familia".

    Ni de broma pensaba Jackson, creía imposible el hecho de que Christen pudiese haber amado alguna vez a su familia.

   Los tres chicos pararon al escuchar los gritos devastadores una persona. Se escondieron detrás de las tumbas y pudieron ver a quien creían había muerto persiguiendo a un niño pequeño de no más de diez años.

—¿Pero que mierda?...

"Recides en grandes disfraces...

   Por mas que les haya dolido no pudieron salir a defender al niño pues de hacerlo revelarían su ubicación y se pondrían en peligro. No pudieron hacer nada mas que mirar la horrenda escena del pequeño siendo asesinado a sangre fría por la hija de la pareja Grayson.

   Cuando el pequeño dejó de moverse la chica cayó de rodillas y comenzó a temblar como si no supiera lo que estaba pasando.

   Jackson pareció notar un cambio en los ojos de la chica, pues al momento de matar al niño sus ojos estaban amarillos, y ahora estaban como siempre habían lucido, azules.

   Estaba tan confundido que ni siquiera notó que ciertos chicos se encontraban detrás de ellos, sonriendo de forma macabra.

sólo para conseguir salir de todo...

—Pero mira a los polizones que tenemos aquí, Bill.— dijo con burla el castaño logrando así que los tres pegaran un brinco y salieran de su escondite.

—Oh vaya, esto no podría estar mejor.

—¿¡Quiénes son ustedes!?.— preguntó eufórica la de ojos bicolor.

—¿Ya se olvidaron de nosotros?, pero si fuimos quienes los persiguieron aquella vez en ese callejón.