Perfecta desconocida. (Segunda parte -Y ahora es mi novia.)

Continuación...

Tenía los ojos de laura clavados en mí, era imposible huir.

*Mensaje* 

-Tomé mi móvil-

Ana: buenas noches mi amor, la verdad es que no he podido dormir porque llevo mucho tiempo pensando en que esta es la oportunidad de estar juntas y quizá la estoy dejando pasar.

-Guardé mi móvil y volví mi mirada a laura-

Lau: Pasa algo?

'No, no pasa nada' -sorbí mi trago-

--

La noche transcurría entre charla y charla hasta topar el tema de su relación.

Ella mencionó que su perfecta novia le había propuesto matrimonio.

-Descargué mi trago sobre aquella barra-

'Entonces vas a casarte?' -Puse mi mano en el borde el vaso donde estaba tomando-

Lau: es algo que aún estamos pensando pequeño girasol.

'No tengo nada que hacer aquí' -susurré-

-Moví la silla donde estaba sentada y me bajé de ella-

'Para que volviste a buscarme, para qué un regalo de cumpleaños, para qué...' -Puse el libro que llevaba en mi mochila, el nuevo regalo y lo puse sobre sus piernas-

Laura no podía entender que era lo que pasaba, Laura solo me miraba profundamente.

Lau: es en serio? -Tomó mi mano y le hizo presión-

'Yo no bromeo con esto, no bromeo con esto' -solté mi mano de la suya-

*Escribiendo mensaje*

RP: estoy en la calle 18 13-566.

Salí de aquél hotel llena de lágrimas, le cuestionaba y de hecho me criticaba también haber salido de esa manera, haberla dejado allí adentro sin entender... En mi defensa me repetía que no soporté aquello de que se iba a casar, yo sólo quería salir corriendo de mí misma para no sentir nada.

Unos minutos después de estar sentada en una silla que había sobre la acera escuché el sonido de Ana, ese sonido imposible de confundir con otra cosa.

Lloraba, estaba llorando como nunca lo había hecho porque era algo que no me esperaba.
Veía a Laura cómo a lo mejor que le había pasado a mi vida y no podía culparla por estar haciendo su vida como posiblemente la estaba haciendo yo. No tenía palabras; pero tampoco ganas de verla más en mi existencia.

-Ana me tomó entre sus brazos calentitos y me abrazó con todas sus fuerzas-.

Un capítulo más para todos ustedes hermosos lectores (as)

Deseando como siempre que todos ustedes se encuentren de la mejor manera, es y será un gusto escribir por y para ustedes.

No se pierdan el próximo capítulo cargado de nuevas y buenas cosas.

Con amor.

Eve...