Capítulo 54- Impotencia

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¿Dónde está?

¡¿Dónde estás?!

Corro lo más rápido que puedo por este oscuro bosque. No sé por qué estoy en este lugar si hace solo un momento estaba en mi habitación; pero estoy seguro de a quién busco.

¡¡LO-LOGAN!! ¡¡¿DÓNDE ESTÁS?!!

¡Logan!

Sin embargo, de la nada el piso se empieza a mover, para después desaparecer y dar paso a un gran océano, donde, por más que patalee e intente mantenerme a flote, me hundo como si fuese un ancla recién lanzada desde un barco.

¡Logan!

Lo-Logan

...Log...

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Me despierto exasperado y tosiendo con la sensación de ahogamiento en mi habitación...era solo un sueño. No...una pesadilla.

Ya van 5 días desde el accidente de Logan y este aún no recupera la conciencia. Siento ese tiempo como si fuesen años...el recuerdo de haber estado hablando con él, jugando videojuegos con él, hablando con él...los siento tan lejanos.  Tal vez esa fue la razón principal de este extraño sueño.

10:34 am

Aún es el tiempo de desayuno, pero no tengo hambre...Ahora recuerdo, esto es similar a lo que sentía los primeros días cuando mis padres y ____ no estaban, después el impacto disminuyó...pero esto tiene algo diferente...siento un vacío en mi corazón y la gran necesidad de ver su linda sonrisa. ¿Este es el sentimiento de un corazón roto e impotencia? ¿acaso esto es realmente amor?

Camino hasta la sala y veo a Alison haciendo lo de siempre: viendo sus telenovelas. Sin gesticular palabras, camino hasta la cocina y me sirvo una taza de café. Me desplazo al patio trasero que, aunque no lo usemos mucho, es relajante en momentos como estos. Me siento en el banco que está debajo de un árbol quedado casi que a ramas por la cantidad de hojas que caen al empezar el otoño. 

El ambiente frío de una mañana de otoño junto a el olor a las hojas cayendo y al acogedor calor que me proporciona el sol, me apaciguan, al punto de olvidarme de todo lo que ronda en mi cabeza por un tiempo. Me encantaría vivir en esta paz infinitamente, sin embargo soy obligado a vivir esta realidad que no me reconforta ni me alegra. Todo sería mejor si él estuviera aquí, si pudiera abrazarlo y besarlo recostados en este banco. Sería algo realmente sentimental y, aunque suene algo "cursi", son mis verdaderos pensamientos. Si esa situación llegase a existir, no me importaría la opinión de los demás. Me valdría un pepino que mi hermana o mi tía o alguno de mis amigos entrase al patio y nos encontrara de esa manera. Lo amo y eso es lo único que me importa.

Pero esa situación no ha sucedido, ni sucederá. No me importa si lo amo o no, porque eso no le importa a él. Lo único que pasa por mi cabeza es verlo a él sano y despierto. Volver a ver su cabello mojado en contraste con su pálido rostro. Su sonrisa con sus notables hoyuelos. Su rostro al cantar y tocar la guitarra. Lo extraño demasiado.

Sin tener control de la noción del tiempo, de un momento a otro el sol empieza a ser tapado por las nubes negras y siento gotas de lluvia caer sobre mí. Para cuando llego a tomar conciencia de la situación estoy completamente mojado y lo que quedaba de café está mezclado con agua de lluvia. Sin embargo no me muevo de mi lugar...esto es lo que necesitaba...el apacible sonido de la lluvia al caer.

¿Por qué no puedo verte? ¿Por qué el destino no me permite estar a tu lado? ¿Por qué no puedes amarme? ¿Por qué nada puede ir a mi favor? ¿Por qué?, ¿por qué? Sí, tengo a mi hermana de vuelta, pero, ¿a qué precio si no puedo tenerlos a ambos? Por más que intento responder estas cuestiones, me es imposible...Siempre termino culpando al destino de todo lo que está sucediendo actualmente. Pero no se si creer en este o no. No consideraría que uno es el creador de su destino, pero tampoco creo que todo esté estipulado...no sé en qué creer.

De un momento a otro salgo de mis pensamientos para enfocarme en la realidad y siento que el frío desaparece, convirtiéndose en algo cálido. Al caer en la cuenta, veo cómo mi tía me sermonea por el hecho de no haber entrado cuando empezó a llover. Seguramente ella me arrastró hasta dentro de la casa. Desaparece por un momento, para luego regresar con una toalla en el brazo derecho.

-Ten. Báñate. Después hablaremos sobre lo que acaba de pasar- finalmente me entrega la toalla y camino inconscientemente al baño.

Después de un largo rato, salgo del baño, me pongo una pijama cómoda y me recuesto en mi cama. No pienso, solo me acuesto con mi cabeza en blanco. Lo que me saca de mi estado de trance es el sonido de la puerta de mi habitación.

-Kendall, ¿puedo pasar?- a pesar de que pregunta, entra de todos modos... Se sienta a mi lado y yo me enderezo- ¿qué te está pasando?, ¿algo te preocupa?- me demoro mucho tiempo en responder...no sé cómo decirlo sin quebrarme en el intento o si debo decirlo o no. Alison nota esto- Está bien si no quieres decirlo, no te estoy obligando. Pero cuando hablas de tus problemas con alguien más, el peso es menor- empieza a irse.

-...quiero que despierte- logro decirlo antes de que ella se fuera, aún que al decirlo empiezo a llorar desconsoladamente. Mi tía se acerca a mi rápidamente y me abraza. Empiezo a ahogarme mientras lloro. Esta es la primera vez que lloro tanto con una persona en frente mío. Por lo general, desde que descubrí mis sentimientos por él, lloro todas las noches...pero esto es diferente, hay una persona que me creerá débil después de que esta situación se haya consumado.

-Está bien...sé que él es importante para ti...Llora todo lo que quieras...esto no te hace débil- No tengo pruebas para lo que diré, pero sé que ella ya sabe lo que siento por Logan.

Esa noche no sueño con nada. Pero creo que eso es bueno.



Estudiante de Intercambio (Logan y tú) -EDITANDO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora