Capitulo 7

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A pedido del publico

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No me di ni cuenta cuando ya estaba sobre mi auto conduciendo sin destino, en realidad si había destino un destino totalmente absurdo pero mi corazón me dictaba que lo hiciera y le hare caso....que todo se vaya a la mierda pero hare lo que me dicta el corazón así el mundo se caiga a mis pies.

Poncho: Any que haces aquí!?...le paso algo a Santi?

Any: No, él está durmiendo

Poncho: Entonces?

Any: (respire profundamente, cerré los ojos y los volví abrir) vine a vivir mi presente

Y me lance a los brazos de Poncho y lo bese como hace mucho quería hacerlo, casi lo bote de lo fuerte que me lance a él, se que estaba impresionado porque no me respondía el beso, no se movía y me estaba sintiendo estúpida así que me aparte

Any: Perdón, no debí hacerlo, que estúpida, es solo que después de lo de hoy yo pensé que también querías y leí tu mensaje y salí corriendo hasta aquí y....

Poncho puso su mano sobre mi boca y comenzó a acercarse lentamente hasta que sus labios sustituyeron sus manos y me beso apasionadamente, como hace 9 años nadie más lo había hecho...me estrecho entre sus brazos y cerró la puerta para apoyarme sobre ella, seguíamos besándonos mientras él colocaba sus manos sobre mi cintura y comenzaba a introducirla debajo de mi blusa.

Any: No, no para!

Poncho: Que es lo que pasa?

Any: Esto no está bien, no puede pasar nada entre nosotros

Poncho: Any tu viniste hasta acá y te lanzaste a besarme

Any: Lose, se que fui yo la que inicio todo, es que...

Poncho: Haber, te morías de ganas de besarme (asentí) viniste hasta acá dejando a tu esposo que es mi primo durmiendo sin saber nada (asentí) y ahora no sabes que hacer (asentí) dime, prefieres irte ahora después de todo lo que paso, que prefieres, seguir tu corazón o quedarte con la sensación de lo que pudo haber pasado.

La respuesta era más que obvio....me volví a lanzar a sus brazos, para continuar con el beso y note como Poncho sonrió entre medio de este, esta noche estaba permitido todo y estaba rotundamente prohibido quedarse con las ganas de algo, por esta noche seremos solo Poncho y yo y que el resto del mundo se vaya a la mismísima mierda.

Poncho me volvió a empotrar contra la puerta y de mis labios salió un gemido con el solo contacto de sus manos sobre mi pierna, era una sensación indescriptible, algo que aunque cueste admitirlo solo él lograba hacerme sentir así.....Solo hemos estado una vez juntos pero eso me basto para tener la seguridad de que ningún hombre me haría sentir como lo hizo él aquella noche en Cancún y hoy después de 9 años esa sensación volvía a mi cuerpo convirtiéndose en una droga, de esas drogas que por más que te esfuerces no puedes dejar y yo no tenía miedo por el contrario me sentía más poderosa que nunca, Poncho me hacía sentir una mujer al 100%.

Pegue un salto y enrollé mis piernas a la cintura de Poncho, el continuaba besándome jugaba con mi lengua, mientras yo luego de muchos intentos logre finalmente quitarle la camisa....me aparte y lo mire fijamente a los ojos con la respiración muy agitada comencé a recorrer cada parte del torso de Poncho, de su perfecto torso se por su rostro lo excitado que estaba, como le gustaba la sensación de mis manos sobre su cuerpo

Any: Te juro, que todo absolutamente todo lo que pase esta noche será lejos lo mejor que me pueda pasar en la vida

Poncho: No te arrepentirás?

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