7. Dejarme llevar

699 48 28
                                    

¿Nunca se sintieron como la persona mas feliz del mundo?
Que ya no hay nada que los pueda hacer enojar o entristecer, que están en una nube suave, flotando ignorando todo lo demás.

Así me sentí yo desde que comencé a andar con mi ángel. Ahora que lo pienso, ¿Desde cuando no torture a alguien? Paso mucho tiempo desde que las voces dejaron de gritar en mi cabeza.

Hace tiempo que pude tener una vida normal.

Ahora me relacionó más con las personas, mis compañeros de clases no son las basuras que yo creía que era.

Por un momento pensé en dejarme llevar.

Que fatal error.

Eran al rededor de las cinco de la tarde y volvíamos de hacer unas compras con mi peque.

- Por fin, un sillón. Mis pies piden un descanso- Se tiro apenas abrí la puerta de mi casa.

- No exageres, no caminamos mucho- Le comente mientras dejaba las bolsas en la cocina y me acercaba a sentarme a su lado.

Mi ángel, me sonrió y se corrió hacia un lado, para poder dejarme sentar.

-Hicc, ¿Sabes que día es hoy?- Le pregunte, Sonreí al ver su cara de confusión.

- ¿Sábado?- Respondió dudoso a lo que reí. Siempre fue muy malo recordando fechas, algo que a mi opinión lo hace tierno. Él es tierno.

-Además de eso- Reí. Me preguntó desde que momento se me hizo común sonreír y reír. Algo que antes no me tenia permitido, algo que ellos no me dejaban disfrutar.

- Oh, claro el numerito .... Em ¿el viernes fue 15 o 16?-se puso a pensar, me dio algo de gracia así que lo deje pensar un rato más- Sabes deja que me fijo en el celular-

- Tampoco me refería a eso tonto- Le dije a lo que me miro confuso y volvió a guardar su celular.

- Entonces no tengo ni idea que día es hoy- Dijo riendo. Le revolví su castaño cabello y me acerque a darle un suave beso en los labios.

- Hoy hace dos meses empezamos a andar como pareja- Dije, mientras sacaba una pequeña cajita de mi bolsillo. Pude ver la cara de sorpresa de Hiccup y como poco a poco se iba sonrojando.

- Así que pensé en regalarte esto- Le abrí la cajita y de ahí saque un pequeño anillo gruesos de color gris - Revisa en la parte de adentro- Le dije dándole el anillo.

- Jack- Leyó el grabado en letra cursiva que tenía, luego me miro realmente sorprendido.

- Yo también tengo uno y este dice tu nombre- Dije mostrándole mi mano derecha.
- Te amo Hiccup, mas de lo que tu crees-.

Espere a que dijera algo o al menos emitiera algún ruido, pero solo me miraba y eso empezaba a ponerme nervioso ¿Y si no le gusto? ¿Si cree que soy una molestia? Las dudas me estaban consumiendo, no, no, no, no debía alterarme o el volverá. Hace tiempo deje de escucharlo, hace tiempo que dejo de hablar, hace tiempo que pude ser libre de su constante acoso, hace tiempo que Frost desapareció.

- Se que puede ser algo cursi, pero pensé que seria algo lindo, ya sabes darte algo para expresarte lo que siento- Empecé a hablar rápido por los mismos nervios - Pero si no te gusta no es necesario que lo uses, digo no te estoy obligando ni nada. Yo solo...-

-Me encanta- Me interrumpió. Lo mire por unos momentos y vi como poco a poco una sonrisa iba apareciendo en su rostro, mientras miraba el anillo que ahora descansaba en uno de sus dedos.

- ¿Que? Perdón no te escuche- Le confieso. El me mira con los ojos cristalizados y sin dejarme reaccionar se abalanza contra mi y me besa fugazmente.
Cuando separo sus labios de los míos, susurra sobre ellos.

Obsesión [Frostcup]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora