El ambiente político de México para los simpatizantes de izquierda se volvió complicado debido al gobierno de plutarco elias calles. Los encargos de murales a Diego Rivera iniciados por el ministro de educación jose vasconcelos se paralizaron. Como la fama y la reputación de Rivera había crecido en gringolandia le surgieron encargos en el país vecino, trasladando su residencia allí entre 1931 y 1934 pasando la mayor parte del tiempo en new york.