#24

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Dani's POV

Liam, Caleb y yo fuimos al centro comercial a dar una vuelta. Comimos por ahí y nos dedicamos a estar sentados en una banca conversando. Veo por los televisores que están pasando una canción de Floricienta, y recuerdo cuánto nos gustaba verlo a Jenna y a mi cuando éramos niñas. Me pregunto qué estará haciendo. Desde hace un par de días que no la veo.

- Chicos ¿y si vamos a la casa de Jenna?

- No creo que nos reciba- dice Caleb- me dijo que les dio el día libre a Martha y Heath.

- Como que hablas mucho con ella ¿no? - Liam lo molesta- huele a reconciliación.

- No digas tonterías Liam, sólo somos amigos.

- Y ex novios- complemento y me mira serio- ¿qué? Es la verdad.

- Bien, mejor dejemos de hablar de esto y vamos a su casa.

Tomamos un taxi, estamos cansados de haber caminado tanto. Y una vez que llegamos a su casa presenciamos una escena horrible.

Policías, medios de comunicación, medio país estaba en la puerta de su casa. Por mi mente pasan las peores situaciones.

- No pueden entrar- nos indica un policía.

- ¿Qué sucedió? Somos sus amigos

- La chica despareció, llamó al 911 diciendo que habían entrado a su casa y cuando llegamos la casa estaba totalmente vacía.

- Eso no es una desaparición – digo asustada – Espere ¿está tratando de decir que la han secuestrado? – pregunto y obtengo una respuesta afirmativa.

No... Jenna no, ella debe estar bien. No sé qué haría sin mi mejor amiga. Los tres nos abrazamos mientras esperamos que este bien.

Jenna's POV

Harry insiste en que termine mi desayuno. No tengo ganas de comer, toda la tensión que he sentido me ha quitado el apetito. Tan sólo quisiera que todo esto sea un mal sueño, despertar y que todo sea como antes.

- ¿Ahora qué problema causa la engreída? - David parece estar de muy mal genio, mira la bandeja con comida- ya veo, no quieres comer, déjame decirte algo niña, no te estoy preguntando si quieres comer, te estoy diciendo que tienes que hacerlo.

- No tengo hambre.

- Sí que es tonta tu novia Harry- dice riendo- tendré que hacerla entender.

- Hablaré con ella para que coma.

- Tienes que hacer que te respete, esta zorra hace lo que quiere contigo, te maneja a su antojo. Deja de defenderla.

- Está asustada.

- Tendrá que crecer... Así que le pequeña niña no quiere comer ¿eh? - coge el plato y lo revuelve por mi cara- gastamos dinero en ti maldita perra para que no comieras- aprieta mi cuello mientras derrama el jugo por mi nariz, siento que me ahogo- no se juega con la maldita comida, Jenna.

- Déjala- le grita Harry tratando de intervenir, pero el hombre saca su arma.

- ¿O qué Harry? No me cuesta nada volarte los sesos. Si ella no quiere comer está bien, así ruegues por comida no te daremos nada- dice escupiendo en mi rostro- asquerosa. De ahora en adelante veras que debiste hacerle caso a Harry. Yo estoy al mando ahora.

Comienzo a llorar, Harry limpia mi rostro con un pañuelo y recibe un golpe por parte de David. <Idiota> masculla.

Tengo tanto miedo de lo que pueda hacer conmigo. Comenzare a vivir realmente una tortura.

Sindrome de EstocolmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora