Capítulo 12: Imposible

2.7K 170 6
                                    

Hola!!! He querido hacer hoy la nota en el principio porque debo deciros que hay un trozo de la historia es bastante subida de tono... Solo quería informaros :) También tendréis nota al final jijijiji Disfrutad del capítulo :D 

Xavier

Estoy enganchado a los labios de Alex, son tan tiernos, tan dulces y desprenden un amor cuando da cada beso que es remotamente imposible que seas infeliz. Desde que estoy con ella, ya sé que no hace mucho, pero con estas pocas semanas puedo decir que me siento lleno, vivo, con ganas de seguir hacia delante y de decirle al mundo entero que soy el hombre más feliz de la faz de la tierra.

Sonrío como nunca y Alex sonríe conmigo. Me pongo a bailar con ella, le hago alguna carantoña, hago el payaso buena cosa y ella no hace más que reír, reír y reír. Me gusta verla así, tan sonriente, tan feliz... al menos, yo la quiero y no dejaré que nada ni nadie le hago daño.

La orquesta ya ha terminado, una lástima, no quiero que se termine la noche. La estoy pasando tan bien con ella que no me gustaría dejarla ya en su casa. Si le propusiera pasar la noche juntos no creo que acepte. Sara se tiene que quedar en casa de ella, así que, puedo olvidar esa idea que se me había ocurrido.

-        ¿Qué pasa Xavier? ¿Ocurre algo? -Me dice al ver que estoy pensativo.

-        Oh no, tranquila, estaba pensando en que hubiera sido buena idea que hubiéramos pasado la noche juntos. Pero, sé que Sara se queda en tu casa siempre que hay fiesta. -No quita la sonrisa de su rostro, me coge del cuello con sus finas manos y acaricia mi pelo.

-        Y, ¿por qué no? -Me pregunta con una pícara sonrisa. -Hoy ha sido una noche mágica no quiero que se termine, quiero que perdure, aunque sea un rato más...

-        ¿Y Sara? -Le pregunto.

-        No sé... le puedo dar las llaves de casa. Aunque claro, si mis padres se levantan y solo la ven a ella... -Se queda pensativa. -Qué se quede con Adrian, quien sabe lo que están haciendo, a lo mejor, hacemos de celestinos. -Nos reímos de su comentario.

Tomo el rostro de Alex entre mis manos y cuando me mira, acerco mi boca a su oído, rozo suavemente su oreja con mis labios y la siento temblar.

-        Yo no quiero ser el celestino de nadie, yo quiero disfrutar de ti todo el tiempo que me sea posible. -Sonrío cuando veo que he sorprendido a Alex eso no lo esperaba.

Pero, como siempre, ella consigue sorprenderme más cuando lanza sus brazos al rededor de mi cuello y me abraza fuertemente. Estamos pegados, mi pecho contra el suyo y adoro esta sensación. Ahora, más que nunca, quiero pasar la noche con ella, despertar mañana a su lado y besar sus dulces labios. Y lo voy a conseguir aunque, en este momento, todo el vello de mi cuerpo se ha erizado. Siento los labios de Alex en mi oreja y mi corazón está a punto de salir corriendo como en un maratón.

-        No quiero separarme de ti, nunca -Su voz dulce hace que todo mi sistema nervioso se altere. Sin poder contenerme más, tomo a Alex y paso mi lengua por su labio inferior, luego por el superior haciendo que se retuerza y ansíe mi beso. Sin más, mis labios buscan los suyos y la beso, la beso como un salvaje o más bien como un hombre enamorado.

-        Esto ya está a punto de terminar, si quieres podemos ir yéndonos, ¿qué te parece?

-        Perfecto pero, tendremos que avisarles ¿no? -Me dice un tanto preocupada. Sé como es y sé que se preocupa por todos y, más si son sus amigos.

-        Ahora le llamo, no te preocupes. -Le digo abrazándola y dándole un beso.

Después de llamar a mi amigo y decirle que Alex y yo nos íbamos a mi piso, se ha llevado a Sara a casa de nuestros padres, Alex y yo hemos ido a mi piso. Sí, tengo un piso para cuando necesito estar solo, para cuando quiero tranquilidad, para relajarme... No tengo problemas económicos, así que, me lo puedo permitir.

¿Destino o Casualidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora