Nightmare

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Otra noche fantástica, sin ataques, sin sorpresas, sin sustos, otra noche tranquila de verdad.
Las investigaciones continuaban pero el asesino seguia libre y no estaba solo, le acompañaba Sam su complice tan maligana como el. Pasaron ya siete días y nadie fue atacado, volvio la normalidad, todos pensaban que todo avia acabado, que ya estaban a salvo pero no por mucho, había que degolverle al silencio sus gritos. Glam ya había vuelto a la normalidad con sus amigas aunque era un poco más considerada con los demas. Glam llevaba una semana feliz gracias a Emilio su amante y las clases fluian muy bien con Ariana. Además tenia una nueva mejor amiga, Gabriela quien la acompañaba a todos lados. El campamento parecía un campamento no un matadero, volvia a hacer honor a su nombre. 
Ya llevaban unas dos semanas en el campamento y entre ellos se conocían como de toda la vida.
No hubo mucha luz al largo del dia el cielo estaba nublado y había empezado a tronar no tardaría mucho en llover. Todos habían quedado en el comedor para una pequeña fiesta de pijamas. La fiesta empezaba a las seis pero la gente no tenia que preocuparse por estar bien arreglada ya que solo era una pequeña quedada.
Las únicoas que no iban a asistir eran las hermanas silenciosas y la monja todos los demás incluso los profesores iban a ir.
-Pasad, pasad -Era Amanda dando la bienvenida a los asistentes.
-Gracias.
-Buenas tardes.
-Buenas tardes Amanda.
-Hola Glam.
-Amaaaanda que guapa estas. -Glam fue la primera en fijarse en el atuendo de la profesora. Vestía un largo vestido rojo sangre con un lazo de color blanco en la espalda. Tenia los ojos pintados igual que los labios y megillas. En la cabeza llevaba una tiara con purpurina que la favorecía bastante.
-Gracias Glam, tu también estas muy guapa hoy.
-Yo lo estoy siempre pero gracias por el cumplido.
-Pasadlo bien en la fiesta.
-Igualmente.
Los últimos en llegar se habían retrasado a penas unos cinco minutos.
Todos hablaban, con sus amigos, iban de un lado para el otro contándose historias muy variadas, que si la nueva temporada de ¡Carly, que si el nuevo video polémico de Ariana, que si el nuevo libro, todos hablaban de lo que querían hasta que Amanda la chica de ojos verdes mando callar. Ella había organizado la fiesta esperando que todos se divirtieran.
-Silenciooooo. -Se hizo el silencio. -Gracias, podría decir unas palabras como el porque de esta fiesta pero prefiero decir, ¡¡¡QUE EMPIECE LA FIESTA!!!
Al momento empezó a cantar Ariana, cantó la canción del video polémico y no es de extrañar, en el video, por donde ella pasaba por allí que se liaba.

-Oh he give it to me
Everyday everyday everyday
He give ir to me
Everyday everyday everyday

Cuando acabo de cantar subio un alumno que interpreto una cancion de Nicky Minaj llamada Hey Mama. Glam bailaba con Gabriela y Emilio lo que provoco celos en Chanel.

-¿Que te pasa?
-No me pasa nada.
-¿Seguro? Porque yo creo que te pasa algo.
-Pues crees mal, no me pasa nada.

-¿A quien quieres engañar? ¿Esto tiene que ver con Glam y que ya no pasa tanto tiempo con nosotras? Creeme esto tambien esta siendo dificil para mi pero seguro que se le pasa, acaba de pasar por algo duro y simplemente necesita relacionarse, se le pasara.

-Gracias Stephanie. Espero que sea como tu dices.
Despues de una pequeña reflexion las divas tambien se pusieron a bailar. 

-Glam, me enterado de lo tuyo con Emilioooo.
-SHHHHH. Callate Gabriela.
-Yo solo digo lo que veo. -Glam hizo una mala cara y luego se puso a reir, su nuevo amigo amante habia ido a por unas bebidas y ya volvia esquibando a la gente para no derramarlas. cuando llegó pararon de reir.

-¿Que hace tanta gracia?
-No es nada.

Al cabo de un rato decidieron descansar un rato en un mini sofá de color rojo y al momento se les acercaban las otras divas que pedían hablar con Glam.
-Claro.
-Mejor vamos a un sitio más tranquilo.
Glam y las demás divas fueron a una esquina de la sala donde había  seis sillas también de color rojo.
-¿Glam que estas haciendo?
-¿A que te refieres?
-Antes de venir aquí eras completamente segura de ti misma y nunca te habrías acercado a alguien como Gabriela o Emilio.
-¿Que acabas de decir Stephenie?
-Chanel, Charlotte, Katie y yo sabemos que esos dos no te convienen, eres Glam, Glam y ahora ya no lo pareces. ¿Donde esta esa Glam que antes vestía divina, estaba con gente divina y presumía de ser divina?
Glam tardo en responder pero lo hizo.
-Esa Glam no se a marchado, sigue en mi y seguirá pero no volváis osar a meteros con ellos o veréis lo que Glam aun es capaz de hacer.
-Pero Glam, no te convienen, somos mucho mejor que Gabriela y tu ex novio era mucho mejor que Emilio, era Justin Bieber.
-Es divertido oíros criticar a mis amigos cuando vosotras ni siquiera tenéis.
Después de decir eso volvió al sofá con paso firme, con cada paso que daba resonaba el golpe de sus tacones.
-¿Que querían?
Glam se limitó a callar y mirar a la nada.
-¿Glam?
-Nada importante son una panda de idiotas. Gabriela que tal esta tu cabaña.
-Bien, supongo.
-Genial porque me mudo a ella.
Gabriela la miro a los ojos intentando saber que podía haber pasado pero por una parte se lo imaginaba. No tardaron ni unos segundos y volvía a tener gente solicitándola.
-¿Que pasa Kardashian?
-¿Cómo que que pasa?, tu es lo que pasas.
La cosa se ponía chunga la gente ya había rodeado a las chicas.
-¿No sabia que nacer era un problema para vosotras? No tenéis nada mejor que hacer que venir a contarme vuestra ciega, sorda, muda vida?
Se notaba que Glam tenia práctica ofendiendo.
-Aaaa ya veo, ¿te divierte? Por tu culpa Franco esta muerto y nosotras destrozadas.
-Se supone que debe importarme vuestro estado emocional.
-A que os referís Glam no mato a Franco fue el ángel. -Dijo Gabriela interrumpiendo.
-Ya se que ella no mato a nadie pero fue por su culpa, ella sabia que eso iba a pasar.
-¿A que se refiere Glam?
-Eso Glam explícalo a tus nuevos amigos. -Dijo metiéndose por medio una diva.
-Sabia que dos de vosotros dos moriríais pero no podía decirlo o me matarían.
-Bien Glam por fin saben la verdad, ¿que pensarán ahora tus amiguitos?
-No será lo que pensemos sino lo que sintamos, porque Glam sabia lo que nos pasaría y lo que le pasaría a ella si lo decía pero vosotras no sabéis lo de la flecha, ¿no Kardashian? Si Glam intento contárnoslo y por ello fue atacada, si Franco murió porque no ayudo a Glam, tenia que marcharse y dejarla morir. Tubo suerte de que alguien que la quiere estuviera allí.
Glam se sintió genial cuando oio decir aquello a Emilio. Las Kardashian no tenían nada a lo que responder así que se fueron alejando y con ello la gente volvió a lo suyo.
-Gracias por defenderme.
-No hay de que.
-¿Glam podemos hablar un momento? -Dijo Gabriela con cara de ser algo importante.
-Claro.
Las dos chicas se alejaron de Emilio que estaba mirando fijamente a Glam, esta le hizo una sonrisa para despiderse y el otro se la devolvió.
-¿Porque? ¿Porque eres tan mala con los demás?
Glam estaba parada, sabía que en el fondo no era así.
-Porfavor no me mientas, si vamos a ser amigas quiero escuchar la verdad.
-Mi problema no es algo personal con nadie, no tengo asco a la gente. Ara ya unos seis años cuando estaba con mis padres, habíamos ido al bosque, todo era muy tranquilo hasta que se izo tarde, la noche empezaba a caer y casi no podíamos distinguir las figuras que se formaban a nuestro alrededor. En ese momento fue cuando vi algo era un rayo de luz entre toda la oscuridad, fui tras el, sin darme cuenta que aquello no era obra del bien, cuando conseguí alcanzarlo recuerdo desmallarme al parecer se trataba de un poder oscuro más grande que cualquier otro poder. Obviamente mis padres al verme desaparecer se asustaron, buscaron y buscaron pero no me encontraban yo ya no era presente en este mundo, ya no existía.
-¿Moriste?
-Si. La noche seguía y la luna no estaba, fue entonces cuando ellos también vieron la luz, la describieron como imposible de alcanzar, por cada paso que daban ellos la luz se alejaba más y más. Fue a los cinco días que no los encontraron, por alguna razón ellos habían sobrevivido, la policía me encontró, me encontraron tapada por muchas hojas secas y flores a mi alrededor como si alguien hubiera decorado mi cuerpo.
Mis padres lloraron y lloraron yo estaba muerta pero les sentía, algunos dicen que la muerte es la entrada al paraíso pero no había felicidad en ella, se sentía fría sin ningún sentimiento y todo triste pero por alguna razón volví en mi con una inspiración profunda y con los ojos en blanco levante mi cabeza, de mi salió un chillido espantoso, no entendía como pero estaba viva entonces lo vi tras un árbol, el me observaba un espíritu con cuerpo humano intocable, pensé en acercarme pero cuando vio mis intenciones sonrió y se esfumó. Esa misma noche ya volvía estar en casa he iba a acostarme cuando todo empezó a temblar pero solo lo notaba yo. Fue entonces cuando la ventana que daba al balcón se habrio dejando entrar una ventada de aire que me tiro al suelo. Al levantarme allí estaba el con la misma sonrisa con la que se había ido. Chille pero los labios se me empezaron a coser, trate de correr pero no sentía las piernas. Me giró la cara y volvió a reír, abrió lentamente los ojos más de lo que los tenía abiertos y me dijo:
-Vuelves de la muerte, ¿que tal sienta? Tus padres lloraron mucho ¿sabes?
-Fuiste tu quien me volvió a la vida ¿verdad?
-Si fui yo.
-Gracias, no se como agradecerte lo que hiciste.
Volvió a reír
-He venido a decirte lo que tus padres no te dijeron. Yo no hago las cosas gratis.
-No pasa nada mi familia es rica.
-No necesito dinero lo que necesito es un entretenimiento, cada año sufriras de mi maldición, amigos, familiares, amores todos irán callenfo lentamente hasta que te quedes sola, miles de desgracias sucederán a tu alrededor por donde vayas sólo habrán muertes y más muertes.
Gabriela estaba completamente parada eso explicaba lo que les estaba pasando a ella y al campamento.
-Al principio no le hice caso me encariñaba con las personas pero cada vez que hacía una nueva amiga otra moría así que deje de tratar bien a la gente para no encariñarme. Entonces llegaste tu y Emilio y... volvisteis a complicar las cosas. Llevo seis años esperando a que la maldición se rompa pero solo se puede romper con mi muerte y no sirve el suicidio. He llegado a la conclusión de que es imposible deshacer la maldición sólo puedo esperar a morir sola pero hasta que eso ocurra seguiré sola.
-Glam, lo siento no tenía ni idea de todo esto pero déjame ayudarte, te juro que conseguiremos romper esa estúpida maldición.
-Gracias pero dudo que haya algo que hacer.
-De momento podemos intentar pasarlo bien.
Finalmente Glam consiguió sonreir.
-Tienes razón bailemos.
Y a bailar se fueron las dos, destacando dentro los demas, disfrutando como buenas amigas que eran y felices de momento.

En otro lugar la diversión no era precisamente presente, en una de las cabañas ocupada ya se iban a dormir dos hermanas lo que no sabían era que iba a ser una noche poco tranquila y la última noche para una.
Las dos chicas parecían incapaces de hablar pero por extraño que fuera podían y lo hacían. Las dos iban con un camisón blanco que les llegaba a las rodillas y que pronto se llenaría de sangre. En su cabaña no había luz y a pesar de no ser muy de noche no se veía así que las dos portaban un plato con una vela. Las dos dormían en la misma cama pero mirando cada una por el lado opuesto, la cama era bastante grande y cabían sin problema. Primero se descalzaron, dejaron sus velas en sus mesitas de noche, se tumbaron y finalmente soplaron para apagarlas.
La noche no estaba siendo tranquila para ellas estaban teniendo las dos una pesadilla.

Pesadilla 1: Desi

En esta pesadilla se encontraba en el hospital, caminando por un pasillo lleno de enfermos que la observaban marcharse, todo estaba en silencio, el único ruido que se escuchaba era el suyo al caminar. Entonces paró, había llegado a su destino la puerta del ascensor, pulso el botón para abrir las puertas y al cabo de un rato se abrieron con el sonido de una campanilla golpeandose. Dentro no había nadie, sólo una luz tenue y parpadeante. Entró y pulso el botón para bajar a la planta baja. Las puertas se cerraron y con ellas el descenso empezó, habían recorrido ya medio trayecto cuando paró entre dos pisos. Desi escaló hasta poder ver que podía salir abriendo las puertas. Con un poco de fuerza lo consiguió, estaba ya con medio cuerpo fuera cuando la campanilla volvió a sonar. El ascensor descendió a una velocidad desmesurada cortandola por la mitad, antes de morir pudo girarse para observar como el resto de su cuerpo descendía hasta chocar contra el suelo y dejar un charco de sangre.

Pesadilla 2: Miriam

Se encontraba en el medio del mar, buceando entre tiburones que al parecer no la atacaban. Exploraba el coral y algas que había, también observaba los pequeños peces que la rodeaban cuando por detrás le invadió una especie de humo negro. No veía nada y cuando por fin vio algo ya no estaba en el mar pero tenía por todo el cuerpo marcas moradas que palpitaban y brillaban de un color fluorescente. Empezó a notar un mareo y un dolor increíble por las venas de todo el cuerpo. El dolor cada vez iba a más cuando de repente paró. Todo pareció arreglarse cuando cada uno de esas marcas estalló. Parecía una fuente soltando sangre por todas partes y otra vez el dolor paró pero esta vez la vuelta fue definitiva cuando la poca sangre que le quedaba, guardada en el corazon empezó a arder en llamas. Esas llamas no sobresalian de la piel pero se dejaban ver, cada vez más grandes hasta ahora si sobresaliendo del propio cuerpo. Fue cuestión de unos minutos que el fuego paró al haber acaba ya con Miriam.

Las dos se levantaron a la vez pero una no tuvo suerte al hacerlo porque el ángel estaba delante para devolverla de donde había regresado, a su mayor pesadilla. Y quien recibió ese infortunio fue Miriam quien murió disparada con trocitos de cristal por todo el cuerpo, haciéndo estallar sus venas que luego quemaria con una vela.
La otra hermana no tuvo tiempo de protegerla, sólo pudo contemplar que estaba pasando, el ángel también podría haberla matado pero no lo izo se despidió sonriendo y levantando la mano tras su retiro. Los primeros segundos después de que el ángel marchará fueron confusos, se sentía desorientada, a un lado de la habitación estaba su hermana con los ojos abiertos y completamente en blanco, se tumbó en el suelo, primero sonrió para después llorar. Los llantos se podían oír a lo lejos pero no tanto como para que alguien viniera a socorrerla. No podía creer nada, sentía como si su pesadilla no hubiera acabado.
-¿Que es eso?
-¿El que?
-Aquello de allá.
-Parece... ¡fuego!
Al oír esa palabra todos los miembros de la fiesta se giraron para ver de que se trataba. Al rato el fuego aumentó, se trataba de la cabaña de las hermanas que estaba siendo incendiada.
Los monitores fueron corriendo pero ya no había nadie a dentro, sólo el cuerpo de Miriam. Todos se asustaron al saber que el ángel había vuelto tal vez más furioso pero con las mismas o más ganas de matar. Al rodear la cabaña encontraron a Desi desmallada en la hierba, lo que no sabían era que fue ella quien prendió el fuego y fue el ángel quien la salvo.

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