Camellias / KuroBasu

3_ "...y..."

Hi!
•Doy las mismas aclaraciones que en el anterior capítulo!
Estos personajes no me pertenecen, peeero la historia (redacción, personalidad que le dé a estos, y etc) es MIA.
•Créditos a la personita que creo la imagen❤ que en el cap coloqué.
• Disculpen errores.

♥¡Disfruten está maravillosa historia!~♥
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-Se dice que en la vida hay dos grandes amores: los polos opuestos y las almas gemelas. El problema viene cuando ambos se encuentran.
-Tumblr...

PoV kagami

Salí de bañarme y lance un hondo suspiro, pensando y analizando lo pesado que había sido mi día, como pocos sinceramente.
Primero la rotura de corazón que me propinó kuroko.
Desde la cual me encontraba ido, todo por lo que a este acontecimiento le siguió. Después, el "consuelo" de Akashi, que ya de por sí había sido extraño encontrarlo a su lado, tocándole el cabello.
Ahí fue que inconscientemente, lleve mi mano hacia mi cabello, tomándolo entre mis dedos, estirándolo y moviéndolo. Para después soltarlo.

Después, ¡¿el beso?!, Eso sí me saco de órbita, no es que él haya profundizado ni nada de eso, pero igual lo sentí, de una manera que no había sentido a ninguno o ninguna. Me asusto, sí, no fue común, ni vacío, ni forzado, fue como él es; elegante, directo, impaciente, fuerte pero no para romperte la mandíbula, y suave pero no para dejarte insatisfecho...
"-¿¡Qué demonios estoy pensando!? -pensé jalando mis cabellos nuevamente-. Sólo necesito descansar, fue demasiado por hoy."

Y así, caí rendido en mi cama, teniendo como principal dueño de mis sueños, ya no a un pálido peliceleste, sino a un tirano emperador de suaves labios melocotón.

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Lanzó un gran bostezo al por fin salir de mi cómoda cama King size, yendo por el pasillo hacia la cocina, donde me prepararé el desayuno.
Ni siquiera había visto la hora, ¡pero qué me importaba!, después de todo, hoy es fin de semana, y en la estación de bomberos en la que ayudo a tiempo parcial hoy no me tocaba, tenía el maldito día entero para sumirme en mis estúpidos pensamientos.

Me hice unos huevos con salchichas y un jugo/zumo de naranja, y empezé a degustar mi comida, bastante poco para mi usual apetito pero era lo que me apetecía ese día.
Giró el cuello, haciéndolo tronar en el camino, y veo el enorme reloj negro en la cocina. Sus manecillas marcaban claramente las 15:15 de la tarde...

Mi mente, de pronto, se sentía abatida, como si olvidará una cosa.

"-15:00 P.M -"

Palabras, se repetían sin cesar.

"-Te espero y no te retrases -una voz cordial pero demandante se aclaraba en su mente-"

Y de pronto. Hubo un ¡click!.

¿¡Akashi!? ¡Ay, por el carajo!

"-Me gusta la puntualidad -comento suave-"

Mi cuello dio otra vuelta, está vez más brusco, más forzoso. Mis ojos se fruncen, y se agrandan en signo de sorpresa.
¡Eran las 15:20 exactas! ¡Quería que me tragara la tierra!. Nuevamente gire mi cabeza frenéticamente buscando, con la vista, mi buzo rojo. Con buzo en mano y puesto cerca de la puerta. Cepille mis dientes, ordene mi indomable cabello, me cambié la ropa, y aunque casi lo olvidaba.
Pude agarrar el buzo.

Saliendo de casa, bajando por el ascensor y llegando a puerta de calle. Me dirigí a ...

¿A dónde?... ¡Maldita sea la vida!¡El papel Con la nota del lugar de encuentro! ¡lo había olvidado!