Flashlight | ChanBaek

Epílogo.

BaekHyun se encontraba dormitando cómodamente entre el remolino que eran sus sabanas, completamente agena a las dos personas que con intenciones algo perversas quería interrumpir su buen sueño. XiuMin y su novio JongDae, o como era llamado Chen, habían venido a casa del mejor amigo de ambos ya que era el día del recital de invierno, y querían que BaekHyun se divirtiera un poco antes de su presentación. Pero al encontrar la tierna imagen de cierto castaño no pudieron evitar que aquella idea apareciera en sus cabezas.

Después de haber pedido permiso a la madre de Baek, cada uno tomó un vaso lleno de agua y se posaron a un lado de la cama. Observaron un segundo la cara angelical de su amigo, para luego mirarse con sonrisas malvadas, regresar sus miradas de nuevo al castaño vertiendo todo el líquido vital frio en su rostro.

Cuando el agua impactó con su rostro, BaekHyun despertó sobresaltado dejando escapar un chillido no muy masculino. Pasó una mano por su rostro quitando un poco el exceso de agua que corría por su rostro. Miró a los responsables, quienes ya no se encontraban con aquellas sonrisas además de esconder las evidencias del crimen tras su espalda mostrando expresiones inocentes, que obviamente Baek creía bien poco. Con el ceño fruncida se levantó de la cama y se dirigió a su baño personal en busca de una toalla.

-A que se debe tan agradable forma de despertar- Soltó irónicamente pasando la toalla pos su cabello mojado. Aún no entendía como había llegado a formar un lazo amistoso con aquellos seres que hoy se hacían llamar sus mejores amigos, ah, si, era lo suficientemente tímido para acercarse a los demás, así que ellos se acercaron.

-Saldremos al centro comercial antes de tu presentación, para despejarte.-Habló JongDae entrando a su armario en busca de algo para él. Le gustaba hacer eso.

-Pero estoy despejado, aquí, en la comodidad de mi habitación. O bueno, lo estaba hasta que irrumpieron en ella. -Protesto sentándose en su cama, en la parte seca claro está.

- BaekHyun, no has salido de esta casa desde que regresaste de esa minivacasiones. Estamos preocupados, te estás aislando. Ya no ríes como antes, y cada vez que proponemos alguna salida te niegas o pones una escusa absurda, así que levantaras tu culo de esa cama, te bañaras, vestirás y saldrás de esta celda auto impuesta que llamas habitación con una sonrisa en la cara, ¿entendido? -BaekHyun asintió instintivamente accediendo, porque cuando Xiumin se portaba así daba miedo, y él no quería sufrir las consecuencias de lo contrario.

Rápidamente ingresó al baño, directo a la ducha. Se paró bajo la lluvia artificial, el agua tibia mojando todo a su paso, después de deslizar el jabón por toda su piel, se dispuso a enjuagarlo. Después, tomando el Champú lo aplico por todo su cabello, masajeando el cuero cabelludo deshaciéndose de cualquier clase de mugre. Luego de sacar todo con agua repitió el proceso una vez más, seguidamente salir dela ducha y tomar la toalla pasándola por toda su piel; secándose.

Amarrando la toalla en su cintura, salio de allí e ingresó al armario, donde el barista tenía la vestimenta que usaría. Le paso ropa interior, y cerro la puerta del armario con el dentro. En estos años el pudor se había ido extinguiendo poco a poco, ninguno se avergonzaba de nada, ya habían traspasado esa barrera.

Se vistió, y luego dejó que el mayor le aplicara delineador, y un poco del rímel transparente. Después de terminar se calzó un par de botas negras y los tres se dispusieron a salir de la habitación, y posteriormente de la casa, no sin antes oír el grito de su madre diciendo Consigue un hombre, bebé.

Su madre no era del todo normal.

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Se encontraba tras bambalinas esperando su momento de entrar en escena, estaba un poco nervioso, pero sabía que en cuanto la primera nota dejara su voz se desconectaría del mundo, y se dejaría flotar.