22 - LABIOS MUERTOS

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Portando el hacha un viejo leñador apareció - "¿Nunca entenderé por qué te gusta tanto la lluvia?" - Las gotas se evaporaban al contacto con su barba pero no le tomaba importancia alguna.


En tono burlón la luz le respondió - "Parece ser cosa de humanos" - Centelleaba con cada palabra que decía.


"Hum" - El Leñador acarició su barba - "¿No sería interesante que eso aún sienta cosas humanas?" -


"Desearía que fuera así" - El ser de luz le respondió con la voz quebrada.


"Como sea ¿Qué tanto estás mirando?" - Ambos flotaron a su alrededor y observaron a la chica - "No es necesario ayudarla, ella no está..." -


"Lo sé..." - El sujeto lo interrumpió seco - "Está muerta" - Por varios segundos se perdió en sus propios pensamientos con la mirada clavada y en total silencio.


Los rayos iluminaban la carretera por breves momentos...


"¿Y qué piensas hacer?" - Le preguntó la luz mientras se introducía a su pecho.


"Humm..." - Los ojos del sujeto se tornaron amarillos y de pies a cabeza comenzó a desvanecerse en el viento - "No lo sé" - Respondió cortante.


"¡No espera!, tenemos asuntos más impor..." - El Leñador intentó detenerlo pero el tipo desapareció frente a sus ojos, mirando un punto muerto sujetó con fuerza el hacha - "Maldito... ¡¡Shinigami, shaman o lo que seas!! " - Gritó aumentando las llamas de su barba - "¡¡¿Pero qué demonios pasa por tu cabeza?!!" -


En un pestañeo el tipo apareció justo detrás de la chica sin que ella se percatara, él se inclinó un poco, tomó unos mechones de su pelo y la olfateo cerrando los ojos... Perdiéndose en sus pensamientos. Recuerdos cruzaron por su mente y mientras el pelo se deslizaba entre sus dedos se le escapó una carcajada.


Una respiración sobre su nuca y una extraña risa paralizaron a la chica de miedo. El entorno se volvió frío al punto de poder ver claramente su aliento, moviéndose lentamente intentó calentarse pero el llanto tomó fuerza al no sentir calor alguno.


Estaba tan fría como un cadáver...


Segundos después obtuvo el valor para voltear, pero él había desaparecido. La macabra risa siguió escuchándose a su alrededor, repitiéndose en distintas direcciones. El pánico la invadió y apretando sus oídos se tiró al suelo.


El sujeto se paró frente a ella y al estirar el brazo su mano comenzó a incendiarse, de las llamas celestes surgió un paraguas, cubrió a la chica de la lluvia y cortésmente la saludó - "Hola" - La chica volteó a verlo sorprendida mientras que sus mejillas se ruborizaban. El extraño hombre le ofreció la mano y al levantarla se acercó, invadiendo su espacio personal lentamente secó sus lágrimas - "Una dama no debería llorar así" - Mencionó con mirada fría.


Con una mano la sujetaba y con la otra acariciaba su mejilla transmitiéndole un agradable calor a su cuerpo, el suave tacto del sujeto le aceleraba el corazón mientras trataba de ocultar su sonrojes volteando a otra parte. La mirada inocente de la chica cambió a sorprendida al ver una cosa que llamó su atención, la lluvia continuaba pero el paraguas los cubría sin que nadie lo tocase...


Estuvo a punto de decir algo, pero fue interrumpida cuando el tipo pasó su pulgar rozando levemente su labio inferior. Ambos se miraron directamente y el sujeto bajó la vista un segundo para observar sus labios y luego volverla a ver, ella sabía lo que significaba así que cerró los ojos esperando a que se acercara y él deslizó sus dedos hasta tomar su barbilla cortando lentamente la distancia.


Al otro extremo de Gravity Falls Pacifica disfrutaba del helado cuando una lágrima comenzó a bajar por su mejilla.

Gravity Falls - SatanicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora