Capitulo 9

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Narra Adelia:

Llegue a casa esa casi mañana y entre a la habitacion de Lissa, ella estaba durmiendo como siempre. Mi tía, la que siempre cuida a Lissa mientras yo no estoy, que en realidad no es mi tía, es una vecina que nos ayudo mucho desde que paso lo de nuestros padres, ella es una gran persona, se retiro de la casa con sus cosas a las 7.30 de la mañana. 

Me hice algo de comer y me senté en la cocina mientras podía ver desde esa ventana como el sol iba saliendo y acariciaba su calor en mi piel. Estaba un poco incomoda al estar con este olor a cigarrillo y el calor que todavía tenia. Termine de desayunar y me duche para luego cambiarme e irme a la farmacia a eso de las 9.30 de la mañana a comprar los remedios de Lissa. Ella tenia que tomarlos cuando se levantara, junto al desayuno y este mes ya se habían acabado. 

Cuando volví a casa, ella se estaba levantando de su cama y me recibió con un enorme abrazo como siempre. Prepare su desayuno y le di una pastilla de las tres cajas que tenia que tomar. 

-¿Como te fue anoche? -Dijo

-Bine, por suerte, estuve trabajando mucho. Si quieres a la noche tengo libre, podemos ir algún lado 

-Eso me gustaría

-Sonriendo- Genial, podemos ir al cine si quieres y a cenar

-Si, estoy de acuerdo -Dijo sonriendo- 

-Acaricie su pelo- Nunca.. pero nunca voy a dejarte sola

-Me miro triste - Eso dijo mama una vez y se fue 

-Presta atención a lo que te digo -Tome su dedo meñique con el mio- Nunca en mi vida, mientras yo este viva, estarás a mi lado, pase lo pase, pase quien pase, me veras a mi frente a tus ojos ofreciéndote mis brazos cuando necesites un abrazo

Lissa se hundió en lagrimas y me abrazo con fuerza. 

Mi nombre es VùXta TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora