Decisiones

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— ¿Psicología?— dicen mis padres sorprendidos.

— ¿Estás segura? — dice mi padre.

— Bastante segura — le contesto.

— Pero, que te a llevado a esa decisión— dice mi madre.

— Pues he leído de lo que se tratan varias carreras y esa es la que llamo más mi atención.

— Es que …

— ¿Qué es lo que ocurre? — pregunto— ¿No están de acuerdo con mi decisión?

— Claro que sí cariño, pero es un poco extraño— dice mi padre.

— ¿Por qué?

— Bueno es porque … — dice mi madre.

— Porque soy una loca, ¿es por eso, cierto? — digo molesta— ustedes creen que yo no puedo estudiar psicología porque estoy mal de la cabeza.

— Nunca dijimos eso, sabes que yo respeto tu decisión, solamente quiero estar seguro de que es lo que tú quieres, que es lo mejor para ti — dice mi padre mientras toma mi mano.

— Estoy segura de lo que quiero— digo seria.

— Pero debes estar totalmente segura, tal vez necesitas pensarlo mejor, consultar más carreras o pedirle su opinión al doctor Smithsonian— dice mi madre.

— No tengo que consultar nada con nadie, soy yo la que tengo que decidir.

— Yo te diría que lo pienses durante un poco más de tiempo y cuando estés totalmente segura nos digas — dice él.

— Estoy totalmente segura ahora.

— Has lo que dice tu padre, en unos días nos dices que fue lo que pensaste.

— No hay nada que pensar y mejor me voy porque ya estoy retrasada— digo mientras me levanto del sofá.

— ¿A dónde vas? — dice mi padre.

— A la Luna con mis amigos.

— No te aburres de ir ahí, vas casi todos los días — mi mamá suena seria.

— No tengo nada mejor que hacer aquí— me dirijo a la puerta.

— Esa niña es más complicada que antes — escucho a mi madre antes de salir.

— ¿Ahora tú quieres ser la rebelde sin causa?— dice Johnny que camina a mi lado.

— No quiero hablar en estos momentos — contesto cortante.

— Perdón señorita Drama, deberías caminar para calmarte.

— Esta vez te doy la razón, pero quiero caminar sola.

— Está bien, dejaré que camines sola — dice enfadado mientras desaparece.

No entiendo porque mis padres se sorprenden tanto, se supone que debemos estudiar lo que nos gusta eso es lo que siempre dicen los padres, pero cuando escoges algo se sorprenden o se niegan a apoyarte, son demasiado hipócritas.

No le he contado a mis amigos lo que quiero estudiar, pero estoy segura que ellos si me apoyarán, dirán que haga lo que quiera que es mi vida, no son como mi familia.

Y pensar que está semana había sido fantástica, vencí mi pánico escénico y todos me felicitaron, incluso me dijeron que debería dedicarme profesionalmente al canto, lo consideré pero eso no es lo que quiero hacer el resto de mi vida es solamente un pasatiempo.

— Ahora te crees toda una estrella— dice Johnny a mi lado.

— ¿Otra vez tú?— pongo los ojos en blanco — Creí que me ibas a dejar sola.

Mi Compañero ImaginarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora