Imagina: Nate River y tú

|Amor a primer juguete|

Light volvía ir hoy al cuartel general. Últimamente parecía que vivía allí. Ya no pasa tiempo conmigo, únicamente cuando me viene a buscar para ir y volver de la universidad.

Él me dice que está continuamente allí para resolver casos con L y los demás detectives, pero yo sé que es por pasar más tiempo con L.

Light me contó que fue una de las pocas personas dignas de su admiración, después de mí, claro. Que se atreva a negarlo.

-Bueno, ______, me voy. - me dice Light.

-¿No puedes entrar un rato? Ahora ya no tienes tiempo para mí, Yagami. - dije muy triste.

-_______... Está bien, me quedaré todo el día.

Abrí los ojos como platos, de verdad que lo quiero mucho, pero como mejores amigos eh.

-¡AHH LIGHT! ERES EL MEJOR. - dicho esto, me tiré encima suya y le abracé.

-Sisi, espera un momento, que debo de avisar a L. - me respondió Light.

Yo sólo le abracé más. A veces, tengo muchos celos de L, es decir, no me gusta Light, pero es la única persona que realmente me cae bien.

Estaba tan ensimismada que no me di cuenta de que Light terminó la llamada.

-Genial, vamos a...- Light me interrumpió.

-Pequeña, tengo que ir, surgió algo importante.

Bufé, siempre igual.

-Pero le dije a L que te lo había prometido, y me dijo que si yo confiaba en ti, él también lo haría como para que pudieses venir conmigo y ver la cara de todos del cuartel-rodó los ojos-. No sin antes hacerte una prueba.

-¿DE VERDAD? Oh, AMO A L.

-¿Q-qué? _____ sabes que te adoro, pero ni te atrevas a hacerme eso, sabes que me gusta a mí. - me dijo Light.

Le miré con cara pervertida. -Bien, 2×1, podré ir contigo y acabas de admitir que quieres a L. Y luego me dicen que tú eres más listo. - le eché la lengua.

-Siempre caigo en tus trucos psicólogicos, en eso le llevas ventaja a L. Le caerás bien.

...........

Al llegar a la entrada, Light entró antes y yo me quedé fuera esperando.

Al rato sonó una voz robótica. Me hizo preguntas un poco extrañas, pero respondí con sinceridad.
Se escucharon de fondo quejidos, supongo que de Light, para que me dejase entrar ya, y carcajadas de otros por la situación incómoda en la que me ponía.

Después de un momento, me abrieron la puerta. Y cuál fue mi sorpresa al ver dentro, que había un chico que estaba al lado de Light, 99% segura de que era L (😏) en una posición extraña, un pelirrojo jugando a videojuegos, tan ensimismado que ni se dio cuenta de que alguien había entrado, un rubiales con ropa negra comiendo sensualmente un chocolate (:v) y un albino jugando en el suelo.

Iba a saludar, pero me fijé bien en el albino... No puede ser...

-¡AHHHHH! - chillé como una histérica señalándolo.

El pelirrojo levantó la vista de la máquina. El albino me miraba ceñudo.

L y Mello se sorprendieron, era la primera vez que veían a Near mostrando alguna cara que no sea la de impasible.

En cambio, Light se asustó un poco, pero al mirar hacia el albino y analizarlo un poco lo comprendió. Al instante, se llevó la cabeza a la mano.

-¿Qué me miras? - me preguntó el albino.- ¿La inteligencia que te falta?   Vaya niña que nos traes, Yagami.

-Y-yo... Es que tienes el muñeco en edición especial que tanto llevaba buscando. Ni por internet los hay. -dije apenada. Fue una mala idea venir aquí._____ mira que eres tonta, ¿cómo creías que unos chicos, que te doblaban la inteligencia, no te iban a hablar con superioridad?

-¿En serio te gusta? -preguntó Near, no se podía creer que una chica, que ya no era una niña, no se burlase de que jugase con muñecos, y más, que también le gustasen aún, como a él.

-S-si... Oye Light, creo que fue mala idea venir, no pinto nada, mejor me...

-No, quédate, siento haberme comportado así... Pensé que eras otro tipo de chica... - me respondió Near dándome una sonrisa.

Mello se atragantó y L escupió la tarta.

¿Near disculpándose? ¿ Y sonriendo?

A Mello le empezó a caer bien la chica.

_____, un poco avergonzada, se sentó donde el albino que, con su mano, tocaba el suelo a su lado.

-Soy Near.- me dijo.

-______.

Empezaron a jugar haciendo caso omiso a los demás, que resolvían un caso.

Mello, aburrido, decidió molestar a Near. Resultaría interesante.

Se sentó entre ambos. Y sacó una barrita de chocolate. Le tendió a _____.  Ella, agradecida, cogió un cacho.

A Near le sabía mal. Mello nunca compartía, y menos chocolate.

-Oye, _____, deja aquí jugando a Near y vámonos tú y yo, que me debes una.- me dijo Mello.

Near apretó los puños sin que nadie lo viera. Nadie, salvo Mello. Su plan iba a la perfección. En el fondo sí que quería lo mejor para Near, y lo intentaba ayudar, pero siempre podría molestarlo un poco. ¿Por qué no?

-______, nos tenemos que ir ya. - me dijo Light interrumpiendo.

-Bueno, chicos, nos vemos otro día. - dije despidiéndome, y un poco extrañada por lo que me dijo Mello.

Antes de que Light cerrase la puerta, escuché a Near y Mello susurrando:

-No te atrevas a ponerle las manos encima, me gusta a mí. - dice en bajito Near.

-¿Más que tus muñecos? -preguntó Mello.

-Más que mis muñecos.- afirmó Near.

Sonreí, ya que como estaba de espaldas, no me podían ver. Él me correspondía, no eran tonterías mías.

Mello se las había apañado para que yo escuchara.

Así que sí que tenía razón,  le debía una.