Un vampiro enamorado

PARTE 13 MI HISTORIA

- Bill – me llamo Tom cuando estábamos en la sala el con una bolsa de suero y un vaso de esos que te dan en los cines repleto de sangre - eh porque no me cuentas más de ti sé que me contaste un poco de tu historia pero quiero conocerte, quiero saber cómo eras cuando humano. Ahora sé que eres una persona muy buena, amable y todo eso pero...

- Bueno como te dije mi padre, Edward el me trajo al mundo y te digo algo nunca le he preguntado cómo se llaman mis padres o si él los conoció, no quiero saberlo no porque me duela, no eso no, ellos al abandonarme me regalaron la mejor de las familias, ellos me dejaron si pero mis padres adoptivos son lo mejor – le dije orgulloso de mis padres y ellos me miraban con amor con ese mismo amor que cuando me encontraron en su puerta – sino porque realmente no me interesa conocerlos ni saber nada de ellos, yo tengo dos excelentes padres, que me aman y que amo.

"Cuando niño era caprichoso, voluntarioso, puesto que todo se me daba me consentían tanto –me reí al recordarme de niño, sé que aún no pierdo mis recuerdos porque relativamente no tengo tantos años de ser vampiro, pero es muy bueno sacar esos recuerdos para no olvidar lo que alguna vez fui– era un niño sociable allá donde vivíamos era precisamente esta ciudad solo que nuestra casa se encontraba en el centro, sabes me encantaba ir al parque jugar con los niños y niñas que lo visitaban, pero siempre he estado solo no tuve muchos amigos cuando iba al jardín de infantes y menos cuando iba a la primaria, no se era muy solitario un poco introvertido, huy cuando descubrí que mis padres bueno eso ya te lo conté, fue muy duro saberme diferente a ellos, el no ser su hijo de sangre pero me propuse ser su hijo de ponzoña, a pesar de ser un niño de ocho años entendía muy bien lo que era que mis padres fuesen vampiros yo era muy inteligente y aun lo soy, lo único que no quería era que me apartaran de su lado. Y ellos lo entendieron muy bien así que hicimos el trato de los veintiuno. Eso es cuando cumpliera veintiuno si yo quería me convertirían en vampiro, eso siempre lo tuve presente yo no podría vivir lejos de las personas que amaba, y ellos a mi según mi madre yo le devolví la vida hice posible su sueño.

"Eso no paso conforme iba creciendo me convertí en clásico adolecente, rebelde, que hace locuras pero no muchas siempre fui maduro y tierno, de nada me servía ser guapo y tener dinero en la prepa todos me ignoraban era invisible para todos menos para dos personas. Éramos muy unidos; solos los tres contra el mundo una vez en casa de mi amiga probamos la marihuana – me reí por mis estupideces de adolecente – y no me gusto ni a mis amigos, nunca fui fumador, ni mucho menos bebía alcohol, creo que era diferente porque mis padres me educaron de una manera muy diferente a los demás aunado a que yo era un poco antisocial no por voluntad propia sino por culpa de los demás. En fin era muy distinto a lo que soy ahora, siempre ansiaba los veintiún años cuando la promesa se hiciera realidad ese era mi sueño ser un vampiro y que todos me mirasen con devoción, pero muy secretamente quería enamorarme y formar una familia, no tenía un rostro de la persona ya fuera hombre o mujer no me importaba de verdad yo fantaseaba con un amor verdadero como el de mis padres, quería un cuento de hadas para mí, porque a pesar de parecer frio era muy romántico, e ingenuo creía que tendría un final de cuento o de novela con el vivieron felices para siempre, si como no mi vida como la conocía acabo cuando esos me mataron – le dije endureciendo la mirada.

Tom me miro a los ojos mientras yo seguía recordando mi pasado y la sonrisa traviesa en mi cara se fue al recordar ese día de mi muerte si bien ahora ya no es doloroso, a un sigue ahí en mi conciencia en mí. Nunca lo olvidare, sin en cambio, ahora ya es pasado, porque ya tengo a alguien más por quien vivir y sanar para ser un buen marido y ahora un buen padre como lo son los míos. Seguí hablando de un pasado que parece distante, pero no para mí.

"No fue fácil despertar a una nueva vida, era un neófito que si bien creció con dos vampiros maduros no implicaba que yo fuera maduro, al fin y al cabo era un adolecente de diecisiete años que se comería al mundo de un bocado, mis padres no me dejaban solo en casa y mucho menos a la hora de cazar ah pero un día me les escape yo quería demostrarles que era capaz de resistir la tentación de la sangre humana, grave error cuando salía de caza. Me encontré con una chica era joven; rubia y de ojos claros, su sangre me llamo la atención tenia sed demasiada así que arremetí contra ella mordiendo su cuello sorbí su vida, me convertí en lo que no quería en un monstruo que le arrebato la vida solo por creerse capaz de no sucumbir a la tentación.

Después de eso no salía solo de caza era mucho mi miedo de volver a cometer el mismo error que... chantajee a mis padres hice berrinches como no tienes idea, un día lo supe cuando los vi a esos que me hicieron daño planeaban una nueva fechoría así que los seguí oyendo sus planes y eso me dio una idea de cómo vengarme, de hacerme justica y si Tom les hice lo mismo que ellos me hicieron a mí: los viole a los tres canallas, no con mi cuerpo no soportaría tener algo de ellos en mí, después los mate y me deshice de sus cadáveres. Sus padres les lloraron y los buscaron por algún tiempo pero superaron sus pérdidas; no me dolió ni me remuerde la conciencia por lo que hice no lo lamento lo volvería hacer esos tres se lo merecían.

"Me hice a la idea de lo que era al fin sabía que nada me dañaría al regresar de la muerte me convertí en un ser fuerte, hermoso, y decidido, me traje conmigo a esta vida mi voluntad y mi amor; sigo siendo el mismo que cuando era humano me di cuenta de eso no muy tarde, sigo siendo el mismo Bill de diecisiete años por fuera por dentro soy mucho más maduro, soy un ser pensante y racional, amable muy, muy, muy vanidoso ese es mi defecto, pero sobre todo aprendí a amar como siempre quise y a ser amado por alguien tan, tan bello como tú, que me ama mucho, que ahora me regalara un hijo y tendré una familia como siempre quise mucho más grande de lo que pensé y Tom si tú quieres...

- Claro que quiero tonto – me interrumpió – no me separare de ti ni de nuestra familia nunca más, sabes: soy muy afortunado de tenerte a ti.

- No Tom el afortunado de tenerte soy yo Te amo – le bese y el me devolvió el beso – por siempre

- Por siempre Bill, juntos y con nuestro hijo.