Capítulo 19

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-Hola- me respondió la ojiverde con una sonrisa tímida asomando en su rostro. Llevaba una camiseta gris con unos vaqueros negros, y su abrigo consistía en una campera de cuero color beige. Nunca la había visto con un atuendo que no sean sus vestidos lo cual me dejo desconcertada, y su cabello caía libre en sus hombros, se veía hermosa en el atuendo informal. 
-¿Sucedió algo?- cuestioné con un ápice de preocupación en mi voz, siendo extraña su visita inesperada.

-No, solo quería traerte esto como muestra de agradecimiento por ayudarme a contactar a Supergirl- respondió alzando la bolsa que traía entre sus manos- Además era una buena excusa para verte- añadió con un brillo de picardia en sus ojos.

-Oh...Lena no era necesario- contesté tomando en mis manos el paquete repleto de donas que esta me ofrecía. -gracias.

-Cuando gustes- sonrió satisfecha.
-¿Quieres pasar? -la pregunta saliendo de mi boca para interrumpir el silencio que se interpuso entre nosotras.

-Claro.- asintió tímidamente mientras yo me hacía a un lado permitiéndole el paso hacia el interior del departamento.

Camine guiándola hacia donde se encontraba Alex junto a Maggie, ambas demasiado ocupadas besándose como para notar nuestra presencia.

-Alex- llamé a mi hermana aclarandome la garganta para que me notara.- Esta es Lena, Lena esta es mi hermana Alex.

-Ho...hola- respondió mi hermana atolondrada, sus mejillas encendidas mientras recuperaba su compostura. Debo admitir que fueron escasas las veces que había visto a Alex así de apenada, por no decir que jamás tenía el privilegio de verla en ese modo. Y ahora que la veía me hacía mucha gracia.

-Hola Alex- respondió Lena y pude intuir por el tono de su voz que estaba reprimiendo una risa. Le sonreí comprensiva mientras sus ojos me miraban de soslayo.

-Y ella es Maggie- añadí señalando a la novia de mi hermana quien parecía no estar tan afectada como ella por la situación.

-¿Cómo estás? - cuestionó la más pequeña con tono despreocupado.

-Bien, gracias por preguntar- contestó Lena regalandole una de sus mejores sonrisas.

Tomé la mano de Lena entre la mía, sorprendiéndome a mi misma por tener el valor de hacerlo, y la llevé hacia el sofá indicándole donde sentarse, mientras iba hacia la cocina en busca de un recipiente para las deliciosas donas que por unos instantes había olvidado que tenía en mi mano.

-Así que ¿Noche de chicas?- cuestionó la ojiverde al verme volver con un plato repleto del contenido de la bolsa que ella había traído.

-Si, en realidad es una cita entre ellas dos y yo estoy aquí intentando ver la película- respondí divertida mientras me sentaba a su lado.

-Quizás debería irme, no quiero interrumpir...- comenzó Lena pero una voz cortó su oración.

-No, quedate- interrumpió Alex para mi sorpresa.

-Si además, alguien debe hacerle compañía a Kara... así esta es una cita doble- añadió Maggie logrando que me sonrojara por su insinuación.

-Maggie...- comencé dispuesta a reprenderla, pero una tersa voz me interrumpió en medio de la oración, mientras una mano pálida se posaba con firmeza en mi pierna.

-Esta bien Kara, me quedaré- aceptó Lena mirándome a los ojos, una sonrisa apareciendo en su rostro para tranquilizarme.

Alex y Maggie ya no nos prestaban atención, se encontraban demasiado interesadas en la película o fingían estarlo, puesto a que debían de estar viendo "Pretty Woman" por enésima vez. La ojiverde no había movido su mano que seguía en mi muslo, provocando que mis nervios afloraran.
Tomé una dona, cuidando no mover la pierna demasiado y  provocar que su mano se apartara, y comencé a saborear el glaseado rosado mientras fingía poner mi atención en la televisión.
Estaba por darle el último bocado cuando sentí el calor de su mano apartándose de mí, no pude evitar mirarla preocupada por la falta de contacto, pero cuando giré para fijar sus ojos con los míos una sonriente Lena quitaba el último trozo de dona que había entre mis dedos y lo llevaba a su boca.

-Solo quería comer un pedazo- sonrió divertida por mi desconcierto.

Me límite a reír, no sabía cual era la respuesta que debía darle en una situación como esa.

-Oh Lena, mejor no juegues con Kara y su comida- rió mi hermana viéndonos interactuar.

-Es verdad, una vez me comí su último pote de helado y casi me demanda- añadió Maggie asintiendo enérgicamente,  uniéndose a la risa de mi hermana.

-Lo siento- dijo Lena dirigiéndose a mí, su voz sonando más divertida que apenada.

-Está bien- respondí poniendo los ojos en blanco mientras acomodaba mis gafas.

- Wow Lena, ¿Qué le has hecho a Kara Danvers para que acepte darte su comida?- cuestionó mi hermana fingiendo estar sorprendida- debes tenerla muy enam...

-Ya es hora de irnos- interrumpió Maggie comprendiendo inmediatamente mi mirada de preocupación por la palabra que Alex diría. - creo que el alcohol te está haciendo efecto.

-¡No! ¿Qué alcohol si no tomam...

-Vamos- volvió a interrumpir mi cuñada apeandose del sofá y obligando a mi hermana a incorporarse.
Segundos después ambas habían salido por la puerta inmersas en una discusión que no parecía ser seria.

-Entonces...- comencé interrumpiendo el silencio sepulcral que se interpuso entre nosotras.

-Veamos la película, ya casi termina y esta es mi parte favorita- soltó la ojiverde con indiferencia mientras su mano volvía a mi muslo.

Me límite a asentir y sonreír intentando ocultar mi nerviosismo.
Habían pasado unos minutos y mi atención solo podía fijarse en su mano, sin reprimir mi impulso entrelace sus dedos con los mios fijando mi vista a la pantalla, pude sentir su mirada penetrante fija en mí.
Me voltee sin poder contenerme por mucho más tiempo y nuestras miradas se cruzaron, comencé a acercarme con cautela, cuidando que mis movimientos no fueran bruscos y corté la escasa distancia que quedaba sin pensarlo, uniendo nuestros labios, esperando ser correspondida, pero Lena se apartó segundos después del primer roce.

-Kara tengo algo que decirte -soltó alejándose unos centímetros de mí, la sonrisa de su rostro desaparecido sin dejar rastro.

No respondí, solo la miré expentate a la espera de lo que debía decirme, sentía que mi estómago había subido hasta mi garganta. Al ver que esperaba una respuesta de mi parte me limité a asentir en un movimiento casi imperceptible.

-Creo que... tengo sentimientos por otra persona, estoy confundida- murmuró, las palabras saliendo de sus labios con la rapidez de un suspiro. Lo dijo sin dudar, fue como si se tratara de quitar una bandita, un movimiento ágil que provocaba un dolor intenso pero efímero. Yo jamás lo había experimentado, nunca necesité banditas.

Me quedé paralizada, sin poder dar crédito a lo que oía. Podía sentir en mi interior como mi corazón disminuía su marcha y mis nervios eran reemplazados por confusión y dolor. Mis oídos zumbaban, el sonido impidiendome pensar con claridad. Fue segundos más tarde cuando sentí sus dedos en mi mano. Como si de un acto reflejo se tratara la aparté de su alcance.
-Lena, está bien, pero necesito estar sola- logré decir haciendo un esfuerzo increíble por no permitir que mi voz se quebrara.

-Kara...

-Vete Lena.- pensamientos sobre quién era el o la afortunada de tener a la ojiverde enamorada, sobre cómo alguien más sería quien había ganado la lotería de la vida y podría disfrutar de sus besos, imágenes que me destrozaban por dentro, inundaban mi mente.

-Podemos...

-Te llamaré- volví a interrumpir su oración, apeandome del sofá para dirigirme a la puerta. La abrí con suavidad, esperándola paciente.

Lena me siguió y luego de lanzarme una mirada llena de culpa y pena salió disparada, alejándose por el pasillo, dejándome en el umbral con lágrimas recorriendo mis mejillas. Ambas sabiendo que yo no llamaría.

Siempre tuya (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora