Maldice el día

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!Lamento épicamente la tardanza! ¿Les soy honesta? No le tenia fe al Wattpad y lo dejé por mucho tiempo y de pronto ya tenía seguidores y montones de comentario. Fue muy bello. Gracias a todas ustedes hermosas chicas (y chicos) que me apoyan. De verdad. Tanto amor no es digno de mí. Trataré de dar lo mejor de mí. Si me apoyan haciéndome saber si les gusta con comentarios o estrellas sería genial. Igual si me quieren seguir y agregar en mis redes sociales para estar en contacto se los agradeceré mucho !Vamos a conocernos! 

Scorpion Flower

Chapter VI

Antonio creyó que su vida ahora tendría una mejor estabilidad desde que se habían mudado a Italia. Estaba cómodamente instalado en la casa de los Vargas y en ese justo momento cenaba a lado de Lovino porque tras un mes de mucha insistencia al final Feliciano había ganado y tenía a su hermano cerca de él... o lo más cerca posible.

Fratello te sirvió un poco más de leche.

—No, así está bien.

—Ya... ¿Quieres más cereal?

—No Feliciano, gracias.

—Bien.

A Lovino le costaba mucho trabajo poder sobrellevar la relación porque él no era del todo sensible a los aromas que si hermanito despedía, era como si tuviera el olfato averiado porque en vez de contagiarse con esa aura de paz y amor que usualmente los Omegas en cinta irradiaban se sentía más asqueado de lo normal. Mareado y susceptible a estresase más de la cuenta. Antonio de vez en cuando intentaba llamar su atención para hacer plática pero Lovino no podía dejar pasar como Ludwig prácticamente le daba de comer en la boca. Dicen que los tenedores pueden ser usados de armas mortales, mejor darle de comer al Omega en la boca, así no se lastima.

Era ridículo.

Aunque era Feliciano, así que el porcentaje de peligro aumentaba.

Lovino terminó de cenar, se puso de pie y levantó su plato para ir directo a la cocina y desaparecer de escena.

—¿Ya acabaste, bastardo?— preguntó asomando su cabeza desde la ventanilla que dividía las dos estancias.

—¡Un momento!— exclamó el Alfa. Dio algunas cuantas mordidas al emparedado y lo dejó casi por terminar. Se levantó y entre algo de problemas por mascar aún se despidió.

Carmen elevó una ceja y miró a Lucia de manera cómplice.

—¿Será?— se aventuró la española. Lucia frunció un poco el entrecejo porque la idea le parecía extraña. El hermano de su amiga (amor de su vida para pocas complicaciones) y su hijo estaban creando lazos.

—No lo creo.

—Claro que lo es, mujer— espetó la castaña—. Hay que ser idiota para no darse cuenta.

—¿Darse cuenta de qué?— preguntó Feliciano. La Alfa se quedó con las palabras en la boca porque Ludwig se echó una miradita poco menos que desafiante.

—Nada, cariño.

Felicia se limitaba a ver la puerta de la cocina por la que antes había entrado Antonio. Se sintió culpable porque sentía que había fallado como madre primeriza pero no quería meterse en asuntos de Lovino más cuando él ya había decidido qué hacer con su vida.

—De una vez te lo digo, mujer— le espetó Lucia—. Dile a tu hermano que se aleje de mi hijo o tendré que patearle las bolas yo misma.

—¡Pero tienes que verlos! Se ven tan bien juntos. Deberías tener suerte de que las cosas se queden entre familia.

—No, Carmen, no. Mi hijo no terminará con un-

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⏰ Última actualización: Mar 12, 2017 ⏰

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(Hetalia) Scorpion flower (Spamano, gerita)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora