4. C o n o c e r (2)

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L

Papá: «Hijo, ya te depositamos dos mil dolares en tu cuenta, tuvimos un percance y tenemos que quedarnos una semana más, pero tranquilo, cuando lleguemos te lo recompensaremos, te amamos»

«Está bien padre, nos veremos luego, que tengas un buen día »

Papá:«❤»

Lance soltó un suspiro lleno de frustración mientras se tiraba en su cama. No había tenido una buena mañana. La ducha estaba fría, no había nada en su refrigerador para desayunar, tenia hambre, Sart todavía no había dado señales de vida para ir al colegio y ahora la semana expandida de sus padres.

"Genial"— pensó el chico mirando el techo.

Estuvo en la misma posición durante unos minutos hasta que su celular sonó resonando con la canción que le puso a Sart. Lo atendió de mal gana.

—¿Entonces?—espetó con tono malhumorado.

—Hermano, lo siento, no podre ir al colegió hoy, mami Liz está enferma y mi mamá tiene que trabajar así que me dijo que la cuidara. Tendrás que salir sin mi.

—Está bien...—suspiró —Salúdame a la señora Liz y a la señora Mariane.

Nos vemos mañana...— colgó.

Lance frunció el ceño y se paró de la cama  y agarró su mochila saliendo de su cuarto. Bajó las escaleras, salió dando un portazo y puso una cara molesta comenzando a caminar a su colegio. No.muchas veces Sart faltaba al colegio y cuando lo hacia le avisaba en la noche anterior y el se las arreglabas, no tenía problema. El problema era que hoy era viernes, pero no cualquier viernes, era viernes 13, y aun que muchos no creen en la mal suerte, Lance creía fielmente en que este día le caía toda la mal suerte a él. Ya había empezado el día con lo de la ducha fría, el no desayunar, que sus padres atrasaran su fecha de venida y ahora que Sart se iba a quedar en casa. Sin duda hoy sería un día muy interesante para Lance.

Llegando a la entrada del colegio se chocó con algo, o mejor dicho alguien, al no estar prestando la mínima atención al frente. Maldijo en murmuros al ver a Stephan Taylor frente a él, un chico muy popular, muy alto, muy guapo y sin duda muy fastidioso para Lance.

—Lance, mi amor, que sorpresa tan agradable—dijo el chico sonriendo.

Lance hizo un intento de ignorarlo tratando de rodearlo pero Stephan lo impidió agarrando su brazo sin dejar esa sonrisa que Lance siempre odio.

—¿Podrías soltarme?—preguntó entre dientes conteniendo las ganas de golpear el rostro del mas alto.

—Oh, vamos Lance, sabes que mi oferta sigue en pie para ti, jamas se va a expirar.

—Primero lamo el culo de un camello a tener sexo contigo, estúpido. —se soltó jalando su brazo y caminó entrando a colegio casi echando humos por las orejas.

Si bien es sabido Lance era un chico con un paciencia increíblemente inexistente. Y la poca que tenía la usaba con Sart. Antes intentó tenerla con aquellos que se metían con él, pero su paciencia se fue por el drenaje cuando Stephan casi lo trata de besar a la fuerza en los baños del ala este del colegio. Ese mismo día Stephan le propuso tener sexo sin compromiso y Lance no lo soportó pateándolo en sus partes nobles mientras  gritaba que era un violador. Desde ese día Lance tiene un humor más inestable y una paciencia que si acaso la puede tener con Sart.

Sin Besos (Yaoi/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora