Te quiero

253 25 14
                                    

Como es su rutina de domingo, Marinette despertó muy temprano a correr para luego regresar a casa después de una hora y seguir con su entrenamiento. Término rápido y fue a bañarse inmediatamente, ansiaba llegar a casa del Rubio y no era precisamente a causa del celular.
Después de bañarse, se dirigió a su ropero donde eligió un vestido rosa con flores adornado y un suéter delgado de color negro para vestir, busco sus botines cafés con un poco de tacón para completar su vestimenta.
—Que bien te ves Marinette— dijo Tikki viendo como se arreglaba el cabello su portadora.
—Gracias, hoy iré por mi celular—comentaba Marinette mientras tomaba sus cosas para ya salir.
Bajo las escaleras con paso veloz, pero una voz la detuvo.
—¿A dónde vas? Marc no mencionó que saldrían hoy—Dijo Sabine sería.
—No, hoy saldré con Alya—La voz de Marinette se escuchaba nerviosa.
—Esta bien, pero no llegues tarde.
La chica respiró y siguió su camino.
Adrien estaba en su casa estudiando los periódicos que publicaron las muerte de su padre y todas sus investigaciones, revisaba los archivos y recordaba y escribía los posibles asesinos, pero no le parecía tan congruente. Fue interrumpido por  el sonido de la puerta que había sido golpeada tres veces.
—¡Plagg escóndete!—ordeno Adrien a su kwami y se levantó de su cama para abrir la puerta, no son antes recoger todo el desastre que había hecho a causa de su investigación.
Al fin abrió la puerta y se sorprendió mucho al darse cuenta quien lo fue a visitar.
—Ho, Hola—Marinette estaba realmente nerviosa, no podía articular otra palabra.
—Hola... Adelante—Adrien dejo a la chica entrar a su casa, también estaba nervioso.
—Vine por mi teléfono—Mencionó Marinette señalando el celular.
—¡Claro! Creí que no vendrías por él y como dijiste que no quería volver a verme no quise llevártelo—Decía Adrien mientras iba por el celular y se lo daba.
—Sobre lo que dije antes, te pido una disculpa y quiero decir que...—Marinette hablaba mientras se acercaba más y más a Adrien— gracias por salvarme, no se que hubiera pasado, y lo que pasó después...
—De nada y se que no recuerdas pero te puedo asegurar que no me aproveche—Interrumpió Adrien alejándose un poco.
Marinette bajo la mirada.
—Si recuerdo lo que pasó— dijo al fin lo que dejo al Rubio sin palabras.
—¿De verdad lo recuerdas?
—Si, no lo hice en el momento, pero ahora si, si lo recuerdo.—Marinette volvió a estar cerca de él, frente a frente.
—¿Y ahora que?—Preguntó Adrien con miedo.
—No lo sé, tal vez deba irme—La chica le dio un beso en la mejilla al Rubio y este se sonrojó, después de esto se alejó para salir pero Adrien la detuvo del brazo y en un movimiento rápido la giro hacia él y quedaron muy cerca del otro.
Se miraron a los ojos por cortos segundos y poco a poco los cerraban para volver a probar sus labios, y una vez más ya no podían parar. Se entregaban todo en ese beso, era tan intenso que sentían explotar por dentro, se separaron un poco, pero sus frentes no se alejaban.
—¿Por qué haces esto?—decía susurrando Adrien.
—No lo sé, por primera vez hago lo que mi corazón me dice, y tu ¿por qué me correspondes?
—También estoy escuchando a mi corazón—terminando de decir esta frase volvió a besar a Marinette.
Sus cuerpos estaban tan juntos que podían sentir el calor de su ser, se separaron y los dos se reían sin más.
—Ya deja de mirarme—Decía Marinette sonrojada.
—Eres tan bella— Comentaba Adrien mientras la tomaba de las manos.
—Quiero estar siempre juntó a ti.
—No deberías, no soy bueno para ti—Adrien bajo la mirada.
—Si crees que es porque no eres de sociedad, no me importa.
—No es sólo por eso—El Rubio de alejo de ella—¿podemos olvidarlo.
—¡No!, estoy segura de que sientes lo mismo que yo.
—No lo niego, pero no me conoces.
—Estoy dispuesta a conocer cada centímetro de tu ser.
—No importa que sea ¿Me aceptarás?
—No importa que—Marinette se estaba arriesgando mucho, entregaba su corazón a alguien que apenas conocía.
El celular de Marinette comenzó a sonar, su mamá era quien la llamaba, contesto de inmediato la llamada
—¿Mamá?
—¿Dónde estas?
—Con Alya.
—Alya vino a buscarte a la casa.
---------------------------------------------

No he recibido ni un comentario acerca de mi historia y no se si les esta gustando porque tampoco hay votos y conforme pasan los capítulos bajan el número de lectura acaso ¿Va muy rápido la historia?
¿Le falta algo mas? ¿Hay algo que no les agrada? Me gustaría saberlo
Gracias a los que leen ;) ¡Que tengan un lindo día!

CriminalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora