Capítulo 16: "Maldito Corazón "

98 13 11
                                    

Anoche me dormí pensando en Trevor, él tiene algo. No sé qué es lo que provoca en mí. Él es raro.

No dejo de pensar en el beso, ¿Qué pasará hoy?

Odio esa sensación que él me deja, es miedo, nerviosismo, curiosidad.

Me gustaría saber qué pasa en su cabeza, qué es lo que piensa, qué siente cuando me ve.

Cuando él se acerca a mí, me cuesta respirar, me pongo nerviosa.

A veces lo odio, pero no del todo.

Me siento muy confundida.

–Hey, Abby,– Theo me habla sacándome de mi mente– ¿Me escuchaste?

¿Él me estaba hablando?

–Perdón, no te escuché, ¿Qué me decías?– respondo sintiéndome tonta.

–Te pregunté cómo estuvo el baile.

Ahh.

–Estuvo bien, supongo– en realidad, el baile me encantó y viajaría en el tiempo para volver a vivirlo.

–Al final fuiste sóla, ¿No?– me pregunta.

¿Le digo que fui con Trevor?

Sí, se lo diré, ¿Qué podría pasar?

–No, fuí con– suspiro– Trevor.

Él me mira sorprendido.

– Que bien, supongo... ¿Él se portó bien?

–Sí, ¿Por qué no le haría?

¿Qué me esta ocultando este lobo?

–Nada, olvídalo.

–Okay...

Luego de varios minutos en silencio, pregunta:

–¿Él... Te beso o algo por el estilo?

En su cara de nota el nerviosismo que tiene.

Su pregunta me incómodo mucho.

De igual manera le diré la verdad.

–Sí, nos basamos.

El suspira.

–Otra más que cae en su trampa. Él solo está buscando con quién acostarse. Seguro qué hoy ni siquiera te hablara. Lo siento mucho, Abby.

¿Lo dice en serio? Sus palabras me lastimaron un poco, yo quiero creer que Trevor cambió.

Quiero creer que él siente algo por mí.

–Para, no digas eso.– fue lo único que se me ocurrió decir.

–Lo siento, pero lo que te digo es verdad. Él no tiene sentimientos, no tiene corazón.

¿Por qué dice eso? ¿No ve que me está lastimando?

Lo admito, siento cosas por Trevor. Él... Me... Gusta.

Listo, lo dije.

Mis ojos están llenos de lágrimas, pero las mantengo a raya.

No quiero llorar.

–Theo, para.– le digo, él me mira.

–Lo siento Abby, pero ya caíste en su juego. Mírate, mira lo que te está haciendo. Estás apunto de llorar por ese inútil. Él solo jugó contigo, sólo te quería para tener sexo.

Espera, ¿Qué?

–No tuvimos sexo, solo me besó.

–Pues, no creo que quiera más de tí. No será la primera vez que lo hace.

El Humo OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora