SECRETOS (KYUMIN)

UNO

La historia de dos príncipes y una princesa

Mi vida siempre había sido monótona pero desde que entré a la prestigiosa empresa "PHOENIX" dio un giro de 360° y no precisamente gracias al trabajo que allí realizaba, no. Habían sido esos tres jóvenes que día a día intrigaban mi vida aunque ni ellos mismos eran conscientes de aquello.

Habían sido esas tres almas que a pesar de ser completamente diferentes entre sí, tenían algo en común definiéndose en una sola y anhelada palabra: Libertad.

Desde el primer día que puse un pie en la empresa quedé fascinado por los tres amigos no siendo el único, pues incluso las personas mayores eran admiradores de los tres por lo que no tardé en enterarme sobre quienes eran.

—Son los príncipes—me dijo una de las secretarias.

— ¿Príncipes?—pregunté tratando de reprimir una pequeña sonrisa.

—Sí, ¿vez a los dos de cabello negro?— preguntó mientras observábamos a los protagonistas de nuestra conversación que se encontraban entrando al edificio a lo que sólo asentí—Son hermanos y los hijos del dueño. Ella es mayor que el por dos años y a pesar de ser hermanos son completamente diferentes. Le llaman "princesa rebelde "y su hermano el "príncipe tímido". ¡Ah! ¿vez al chico de cabello castaño?—volvió a decirme mientras ambos éramos testigos de cómo subían al ascensor y la puerta se cerraba—Él es el "príncipe de hielo", amigo de los dos.

Después de oír aquella particular descripción volví a dirigir mi mirada hacia el elevador por donde momentos antes habían subido "los príncipes". Aunque en un principio sus apodos me causaron gracia con el transcurso de los días comprendí por qué los llamaban así y debo admitir que los apodos les quedaban a la perfección.

Como bien me habían dicho, Ha Neul era el dolor de cabeza de su padre ya que constantemente vivía metiéndose en problemas siendo la mayoría de ellos por defender a su hermano. ¿Por qué? Porque su hermano quien exteriormente era muy parecido a su hermana, ambos dueños de una belleza y finura particular, en carácter eran como polos opuestos. Lee Sungmin era más callado, más tranquilo, siempre preocupado por el torbellino que representaba su hermana. Y por último estaba Kyuhyun, tenía la misma edad que Ha Neul y en cuanto a belleza no le envidiaba en nada a los hermanos, pero a diferencia de estos dos últimos casi no sonreía. La mayoría del tiempo se encontraba serio quizás demasiado para un muchacho de 20 años.

Cada día según tenía entendido, luego de terminar las clases venían a la empresa para que así su padre les enseñara el manejo del lugar ya que al final serían ellos, sus hijos, quienes heredarían el negocio. Todo daba a entender que Kyuhyun al acompañarlos tendría un lugar importante en la compañía también.

— ¿Qué hay de su madre? Nunca la he visto—pregunté en alguna ocasión a un compañero.