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La farola de las begonias brilló hasta estallar en un millón de partículas, a la vez que un ardor en la espalda me hincaba.

''Mis alas te regale'' repitió Ismael, y esta vez si le creí.
Le creí porque eramos testigos de como brotaban cual flor en primavera un par de hélices moradas, únicas y majestuosas.

''Mis alas te regale'' y pregunte por qué; porqué si no soy alguien especial, y al parecer lo suficientemente incompleta para que un ser de fantasía me dañe.

''Porque necesitas despertar, ver lo que es la auténtica vida. Abre los ojos por favor.''

¿Despertar de qué? Estoy despierta, estoy cociente; ustedes son los dormidos, los drogados, los ignorantes... los que desbaratan.

Sin embargo ante la duda, intente abrir mis ojos: no podía ver nada, todo era demasiado blanco.

Tu vida, mi universo, la existencia, nuestros sueños y un jardin #ConcursoUTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora