CAP 35

36 4 0
                                    

Es difícil ver cómo las cosas son de una manera hasta que haces una estupidez, aunque esta fue una estupidez grandiosa, sus labios eran tan suaves y dulces como un algodón de azúcar, y yo era una simple niña pequeña a la que le dan uno y parece enloquecer, así me sentía, a punto de colapsar, estaba tan tranquila en sus labios, eran tan distintos a los besos de Oscar, quizá es distinto besar con pasión a besar con amor, pero como nada es eterno, tuvo que acabar, pero lo extraño fue lo vacía que me sentí cuando el beso acabó, como si dependiera de ello.

Quería ir linda pero a la vez sensual y cómoda, por lo que el resto de día me la pase descansando y buscando mi vestuario, ese beso aún seguía dando vueltas en mi cabeza, todo había sido tan rápido y tan confuso que con solo pensarlo me dolía la cabeza, no tenía idea de que podría estar pensando o sintiendo Mario, creo que debe estar mucho más confundido de lo que yo lo estoy, se que no es fácil que la persona que amas solo se esfume de la tierra y no sepas dónde está y luego regrese y te bese, debe estar odiándome le he hecho daño, la fiesta sería a las 8:30 pero yo llegaría un poco más tarde, nunca suelo llegar temprano a las fiestas, esta noche quiero olvidar todo aquello que me causa dolor de cabeza, quiero disfrutar de mi vida.

Se que esta noche será genial, algo dentro de mi lo dice, y siempre hay que tener la esperanza de que algo bueno sucederá, estaba muy emocionada porque próximamente sería mi primer partido, en el que tenía que demostrar a la hinchada y a todos quién era, y desde luego no podría defraudar al equipo luego de toda la confianza que depositaron en mí.

Cada segundo, cada minuto, era más difícil aceptar todo lo que sucedía, era tan confuso todo lo que sentía que ni sabía que era, era una avalancha de sentimientos encontrados y se hacía una peor cuando lo miraba, me confundía más de lo que estaba, en tanto llegó la hora de irme, llegue más rápido de lo que pensé y mientras aparcaba mi auto eran las 9:10, Cristal me llamó y le dije que ya iba entrando, al hacerlo todo era tan hermoso tan casi perfecto, fui donde estaban todos que al verme parecían bobos, cosa que me causo risa, trate de no mirarlo pero era tan imposible ya que estaba frente de mi mueble, tuve un largo rato tomando selfies con Erik y con mis amigas, y otro largo rato bailando, hasta que el efecto del alcohol estaba empezando a funcionar en mi y la persona que menos quería me ayudo, y me monto a un auto no se a donde me llevaría solo esperaba que no fuera a su casa pero estaba tan borracha que me quede dormida.

HASTA QUE TE CONOCÍ  "Mario Götze Y Tu"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora