Estoy para ti

16 1 1
                                    

Capítulo 25

Despierto, recordando que Jeremy va a pasar por mi para ir a rehabilitación. Me levanto, me visto y bajo las escaleras. Llega Jeremy y me subo a su auto

-¡Hola Marty!

-Hola-no me siento bien.

Y el no contesta nada porque sabe que diré algo que pronto me arrepentire.

Tengo tantas ganas de llorar y lo peor es que no se porque. Siento que tengo lagrimas atras de mis ojos que quieren salir, pero parpadeo todo el tiempo para quitarlas de mis ojos y dejarlas escondidas. Trato de pensar en cosas que me hagan felices pero no se me viene a la mente ninguna, es como una tormenta de todas las cosas malas que han pasado. Aprieto mis manos con fuerza, también para evitar llorar. Cuando ataque a Mary, cuando la maestra me dijo que era mala persona, mi enfermedad, mi papa y la muerte de mi madre es lo que me tiene así.

Mis esfuerzos sirven, logro no llorar, pero Jeremy me conoce muy bien, sabe cuando me siento feliz, cuando me siento triste, enojada, confundida, extraña y cuando tengo ganas de llorar, sabe mis los pequeños detalles sobre mi, y lo mas pesados detalles también. Yo también lo conozco muy bien, esta triste, no se porque, pero creo que es porque yo lo estoy.

-No te juzgare si lloras-dice Jeremy

-Es que... tengo miedo de llorar, porque esta sera una de las miles de veces que me vas a ver llorar y ya no te va a importar mas adelante, no te va a importar mas adelante que me sienta mal, ya que lo habras visto mil veces.

-Cada una de las veces que vas a llorar te apoyare, porque estoy para ti. En serio, no me gusta que estés mal, y no te dejare sola sufriendo, puedes sufrir con alguien al menos ¿no?

[Estoy para ti], siempre lo ha estado, ¿porque dudo si no lo estará?

-Muchas gracias Jeremy. Si, jajaja me gustaría mucho sufrir junto a ti.

Se rie.

Llegamos a rehabilitación (terapia). En realidad se suponen que me ayudan emocionalmente y fisicamente, pero solo espero salir de aquí, o solo quiero ya estar bien, porque todo parecia tan normal y llegó esto y jamas me había sentido tan débil, porque mis nervios ya no son como los de antes, y ni si quiera se a donde voy con Jeremy, es frustrante vivir asi.

Me ponen a hacer unos ejercicios en los pies... solo intentan que me recupere.

Estoy tan cansada y lo peor de todo ya no podre usar tacones.

Termine .. cansada pero feliz. Feliz de que ya estoy mejor... y que Jeremy este aquí.

Solo espero no recaer.

De camino a mi casa Jeremy me dice:

-¿Como te sientes?

-Exclusivamente feliz-sonrio y el se rie- y tu?

-Extremadamente feliz-me rei.

-Jamás había estado así Jeremy... Jamas, no recuerdo en mi vida haberme puesto así, porque este sentimiento es único.

-Yo si he estado feliz así unas cuantas veces, pero son contadas. ¿Todos los dias iras a rehabilitación?

-No, solo cada semana- sonrió.

-Okay, podríamos comer pizza en mi casa, si quieres...?

-Mm hoy no.. pero mañana si, es que es cansado hacer ese ejercicio en los pies, cuando tus piernas apenas se van acostumbrando.

-Okay. Me gustaría ser feliz para siempre ¿a ti no?

-No, si no ese sentimiento no lo amariamos tanto, nos acostumbrariamos.

-¿Porque siempre tienes que tener la razón?- lo dice en un tono gracioso, para nada celoso.

-Creo que el no ser guapa lo recompensa por pensar bien las cosas.

-No eres guapa.

-Tu comentario no me ofende del todo, creo que ya venia preparada para eso.

-Eres encantadora.

No tardo en que me sonrojara. El tenia un don, el de halagar a las personas pero no se si estaba diciendo la verdad respecto a eso. Es tan empalagoso pero de una manera que no hace que vomite.

-Gracias Jeremias.-toda roja.

-Y no me cuesta nada decirlo.

-¿No te da pena?

-De tanto que lo pienso y de tanto que le doy vueltas se me pierde el miedo.¿A ti te da pena?

-¿Que?-lo digo como si no supiera.

-Emm... decirle a las personas que las quieres.

-Tal vez... si... demasiado.

-¿Porque?

-No me educaron así.. a... decir halagos si tan si quiera pensarlos.

-A mi tampoco

-Y ¿porque lo haces?

-Porque quiero que te des cuenta de cuanto me encantas sin que te lo diga directamente.

-Creeme Jeremy, lo se, un poco tarde pero me e dado cuenta-mirandolo fijamente a los ojos, estacionados afuera de mi casa.

-¿Entonces?-me mira atentamente, tratando de cachar mi respuesta. Sus ojos azules clarisimos que jamas había visto tan cerca me están diciendo que quieren una respuesta y yo la tengo.- ¿Sientes algo parecido?

-Si-se me llenan los ojos de lagrimas, es que me cuesta tanto decirlo, jamas se lo había dicho y se siente tan bien hacerlo.-Te quiero.

-¿Tanto como para ser mi novia?-feliz, con los ojos tan atentos a los míos.

Tanto como para vivir para siempre con el. Lo quiero tanto y estoy tan segura de eso que podria gritarlo... porque estoy convencida de que el es el único que me hace feliz cuando todo lo veo mal. El vino a mi cuando mas necesitaba a alguien y parece que lo hago feliz y el a mi, no hay razón para no amarlo.

-Si-se me sale solo una lagrima de felicidad, creo que era mejor que saliera, yo jamás le habia demostrado que lo quería, ya es tiempo de eso.

-Al grano. ¿Quieres ser mi novia?-sonrió, con una sonrisa de esperanza, alegría y... amor.

-Al grano, si, me encantaría ser tu novia- solte una risita de emoción muy larga. El estaba en el asiento estacionado y yo iba de copiloto. El mirando mis labios, feliz, contento y emocionado se acerco a mis labios que no costo tanto porque estábamos muy cerca y me beso, fue algo tan rápido y no esperado. Sabia lo que tenia que hacer. Jeremy sabia besar muy bien, parecia hacer practicado y yo no besaba mal. Estaba oscuro, solo estábamos el y yo y todo parecia perfecto, como esos momentos únicos de la vida que parecen eternos y lo peor era que no era eterno pero era mágico. En realidad nos besamos lentamente, el iba lento... como yo le había dicho que me gustaban las cosas. Me acariciaba el pelo y yo el suyo. Si... solo 8 segundos del beso pero fue eterno para mi. Mire sus ojos azules otra vez, estaba realmente contento y no me cansaba de verlo.

-¿Porque estas tan guapo? ¡Dios mio!.

Se rie.

-Marty, gracias.

-Gracias a ti, creeme que ese beso lo recordare para siempre.

-Yo igual.

-Jeremy, tengo que entrar a mi casa, es tarde. Nos vemos mañana

Se me quedo mirando de una manera extraña.

-Que?-le dije

-Es que me gustas demasiado!

Estoy para tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora