Kendall se sentó alejado de la chica a la hora de la cena le costaba probar bocado se sentía como si un enorme meteorito le hubiera pegado en la cabeza, no tenía idea de nada… ________.. se vió pensando en ella. Y sacudió su cabeza Logan lo miraba, con la boca llena de puré. El casi no habló en todo lo que estuvieron en el comedor. ______ y Erin se sentaron y hablaban como si nada, el la miró y su cara cambió de color del blanco al rojo en cuestión de segundos, y para distraer sus pensamientos, se puso a comer.
- Logan: Mi hermana está loca! –dijo al fin y lo sacó del silencio impuesto entre ambos por Kendall a la fuerza – No lo crees así?
- Kendall: Eh... mmm – la miró – no sé por qué lo dices…
- Logan: No sabes? – dijo mirandolo raro - si no te grito de pronto la besas… - él lo miró rápidamente.
- Kendall: De qué estás hablando? – preguntó levantando la voz
- Logan: De qué? Kendall, tus ojos se la comían… diablos, si no hubiera sido mi hermana hasta yo trataría de conquistarla… pero yo amo a Erin… y ella bueno es romántica, pero nunca había dicho algo así de la misma manera que mi hermana…
- Kendall: Si, pero yo no quería besarla! – dijo acercándose a su amigo – Yo… sólo… yo… - no sabia que decirle, porque en realidad si había querido darle un beso… sus labios rosados se veían tan lindos de cerca…
-Logan: Kendall? Te quedaste bloqueado?
- Kendall: Basta menso! – se levantó - voy a… me voy a la cama… tengo que leer…
- Logan: No me digas que leerás los libritos… - dijo burlandose
- Kendall: Muérete! – salió caminando y pasó cerca de la chicas
- Tu: Chao Kendall! – dijo moviendo la mano y sonriéndole – él sólo sonrio y levantó la mano. Salió rápido del comedor y luego se dirigió hacia su habitación, en ese momento el solo queria estar solo y pensar, Llegó a su cuarto y se tiró en la cama cerró los ojos tratando de tranquilizar su corazón y ordenar sus pensamientos… recordó el poema y sus palabras. Tomó el libro y trató de buscarlo.. y lo encontró. En ese mismo poema había alrededor anotaciones que _______ había hecho. Hasta tiene bonita letra, dijo despacio… y se tapó la boca, agradeciendo que no hubiera nadie ahí. Leyó lo que había escrito “De Kendall para Katelyn…” arqueó la ceja. Ella lo había elegido para que se declarara… sonrió. El poema era bonito, pero dudaba que él le diera la misma pasión que ella al decirlo, la manera en que lo miraba, el movimiento sensual de sus labios al hablar y el perfume floral de su cabello.
