La vida que nunca imaginé [Fanfic, BTS V]

Capitulo 10

Sin darme cuenta me había quedado dormida, pero por suerte me levante a tiempo para la hora del desayuno, ya solo quedaban unas pocas horas para llegar a nuestro destino y después de aterrizar probablemente ya no vuelva a tener conexión alguna con V y los chicos (al menos en persona). El sentimiento de tristeza surgía, pero se apaciguaba al tener en cuenta que por lo menos logre conocerlos en persona y tener una buena platica con mi bias y los demás. Además, posiblemente podría verlos de nuevo en los conciertos que hagan en Corea o si es mucha mi suerte puede y hasta me los encuentre por las calles.

TaeHyung volteo de nuevo, pero cuando el chico miraba a su compañero de al lado podía notar su mirada de reojo hací­a mí­ ciertas veces. Tal vez era porque ahora todos los del avión estaban despiertos y alguien lo podrí­a reconocer como lo hice yo, era difícil ser famoso.

Estaba aburrida, mi celular se estaba cargando y no me gustaba usarlo cuando esta así­, mi libro estaba guardado en el maletero localizado arriba de mi cabeza, si, se me habí­a olvidado sacarlo, no tení­a nadie con quien platicar y las nubes no dejaban ver nada. Tan solo con ver a mis hermanos jugar entre ellos o con mis padres, me hacía pensar que tan aislada me sentí­a.

Me cruce de brazos en mi lugar y centre mi vista en los chicos, apenas me venía percatando de que faltaba uno entre ellos ya que en cada fila había 3 asientos y ya que ellos eran 7 uno tenía que quedar solo. Volteé discretamente a mi lado izquierdo buscando al último integrante y lo encontró en el asiento detrás de la señora a mi lado, era J-hope. El chico estaba leyendo un libro mientras escuchaba música con audí­fonos y como si hubiera sentido mi mirada levanto la suya de su libro e hicimos contacto visual, luego me sonrió o eso parecía ya que llevaba un cubrebocas negro, le devolví­ la sonrisa al mismo tiempo que saludaba con mi mano discretamente y puesto que él volvió a su lectura yo volví­ a posar mi vista en el cabello del rubio oxigenado.
Recordé que en mi bolso traí­a una libreta la cual saqué para entretenerme dibujando.

— Esto esta delicioso! — Exclamó alguien de los asientos de enfrente, por el tono de su voz supuse que debía ser Jimin, dudaba que se refiriera a la comida del avión ya que no es tan buena como parece, ciertas veces. Puesto que la curiosidad me invadió pude apenas divisar por un hueco que se estaba comiendo las galletas que les había regalado, mi pecho ardí­a de felicidad, me alegraba tanto el hecho de que les gustaban que no pude ocultar la sonrisa de oreja a oreja que se dibujó en mi rostro, pero miré al piso para que nadie la notara. — Deberían probar las suyas. — Dicho esto siguió disfrutando y al levantar mi cabeza con mi sonrisa a punto de desvanecerse, solo por un segundo pude captar la mirada de V, no pude evitar preguntarme si él ya las habí­a probado. Mire a los demás abriendo sus galletas y probándolas o agarrando un pedazo de la galleta del otro, pero él fue el único que no las saco y J-hope ya que este último estaba en su mundo.

La pantalla de mi teléfono se ilumino y lo agarre en cuanto mire el apodo de Jonathan en él, me habí­a mandado un mensaje, seguramente por no haberle contado de mi concierto anoche o porque Sora ya le habí­a contado todo. Desconecte el cargador y desbloquee la pantalla para contestarle.

"Nathan♠️: ¿Qué tal estuvo tu concierto?"

— Sora no le ha dicho nada... — Me dije a mi misma en voz baja, después empecé a teclear.

"K♣️: No hay palabras para describirlo, estuvo más que increíble. Oye hay algo que quiero decirte."

Si mis cálculos no estaban mal, allí deberí­an de ser alrededor de las 8 o 9 am pues ya quedaban pocas horas para aterrizar y por mi ventana solo se miraban las luces de los edificios resaltando de la oscuridad. Aunque sean vacaciones él siempre se levanta temprano, al contrario, yo me desvelo y me levanto más tarde. Dejé mi celular donde estaba y lo volví a conectar para que terminará de cargarse, centre mi atención en las luces de tierra firme, aun siendo de noche se miraba muy bien, no tení­a sueño, pero eran alrededor de las 2:00am.