El tiempo comenzaba a pasar sin notarlo y ya cumplía un mes en Corea. Los días se tornaban agotadores hasta la muerte pero permanecía feliz y eso me impulsaba para seguir adelante. Mi manejo del coreano comenzaba a mejorar gracias a las clases intensivas de todos los días y a mi mente que captaba todo con rapidez, aun no podía hablarlo con fluidez pero entendía muchas cosas tanto habladas como escritas por lo que aun me seguía comunicando con mis instructores a través del ingles.
Mis compañeras de habitación eran unas jodidas antipáticas, ninguna intentaba siquiera entablar una amistad o algo para hacer mas llevadera la convivencia a excepción de la italiana que desde el primer momento se mostró amable conmigo, su nombre por cierto, es Donatella. Nos conocimos mucho durante este mes, tiene veintiún años y antes de mudarse a Corea vivía en Florencia con su hermano mayor y el esposo de este. Con la voz melancólica y un poco apagada confesó que la madre de ambos lo había echado cual perro de su casa cuando tenia apenas veinte años y le había confesado que era gay, en ese entonces Donatella con quince años, decidió irse junto a su hermano ya que ambos eran muy unidos y ella no estaba de acuerdo con la decisión tan inmadura que había tomado su madre en ese momento. La señora se negó a dirigirle siquiera una mirada a ella después de aquel incidente y de eso ya habían pasado seis largos años en los que había creado un vinculo mas fuerte con su hermano y ahora con su actual pareja quien era una persona maravillosa y la había tratado con tanto amor que a veces sentía que no necesitaba nada mas. Me dijo que a pesar de todo extrañaba muchísimo a su progenitora y que su mayor deseo mas allá de la musica era ver reconciliada a su pequeña familia.
Yo también me abrí con ella y le hable sobre mi vida en Venezuela y sobre el hecho de ser hija única para mi mala o buena suerte. Le dije acerca de mis padres y sus profesiones, acerca de mi mamá siendo gerente de un banco y mi papá como profesor de física en bachillerato, de como fue mudarme y el cambio de clima, horario y demás. Yo vivía en la capital del país en una zona menos peligrosa que el resto pero en donde igual debíamos estar atentos siempre, en una hermosa casa donde me crié hasta el momento en que decidí partir, ubicada en una extensión de tierra un poco calurosa para el clima que normalmente reinaba en Caracas. No pude evitar hablarle sobre lo cálida que eran las personas del lugar y como siempre se ayudaban unos con otros sin tener dobles intenciones.
Si me preguntan a mi, no cambiaría por nada del mundo, mis raíces. Amaba mi país y las personas que habitaban en él así que era todo un reto y un sacrificio vivir ahora aquí en Corea.
Hablamos de nuestros gustos musicales y los géneros que mas amábamos, obviamente el kpop estaba entre nuestros géneros favoritos. Para ella también estaba el tango y el vals, a mi por el contrario me gustaba la salsa y los ritmos mas latinos. Compartimos números, cosa que no habíamos hecho aun y también hicimos algunos intercambios de canciones de grupos que ambas amábamos como Linkin Park y Twenty One Pilots.
Era agradable tener con quien hablar por las noches y entre practicas y clases ya que mi nuevo amigo Rick desaparecía durante los recesos y últimamente hablábamos poco aunque alguna de esas noches en las que me encontraba mas activa de lo normal, tuvimos largas conversaciones a través de whatsapp en las que obviamente nos conocimos muchísimo mas, cosa que nos hizo sentirnos mas en confianza cada que nos veíamos en persona y estrechar lazos.
Tampoco negaré que en mas de una ocasión coqueteamos apenas un poco pero era algo muy sutil y aparte muchas veces empleábamos chistes de doble sentido que podíamos entender solo por ser latinos. Rick era guapo pero no era mi tipo, solo era de esos chicos lindos con los que sales un par de veces al cine o a alguna fiesta y luego nada mas. A menos que quisieras ir mas alla y terminar teniendo sexo en su automóvil porque si, era ese tipo de chico guapo que tenia un auto y si no lo tenia, daba esa impresión igual. Suena un poco divertido como pude encasillarlo en ese lugar pero así era yo y todo él, me gritaba ''chico fresa''.
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Dance Partner - Jung Hoseok
Fiksi PenggemarEmily Ferrari Chica venezolana que logra ganarse un puesto en las audiciones internacionales de la BigHit, se muda a Corea para comenzar su vida como aprendiz pero ¿que pasa cuando termina involucrándose mas de la cuenta con cierto miembro de BTS?.