❄ Пять ❄

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Tn había detenido su entrenamiento para descansar y beber agua, mientras lo hacia vio a Yuri arrojar su celular contra la ventana con ira; Mila se le acercó.

– Oh, ¿Viste la foto de Viktor y Yuuri?

– ¡Cállate, bruja!

Mila rió y se fue. Tn se acercó a Yuri y puso una mano en su hombro, este se giró molesto.

– ¡¿Qué quieres, bru-?! –calló al ver que a quien le hablaba era a Tn y no a Mila.

– ¿Estás bien?

– Eso qué te importa –dijo serio, aún estaba molesto.

– Tu mal humor me afecta –rió.– ¿Estás así por Viktor?

– ¿Por qué debería importarte eso?

– Sólo pregunto. Pero si no me quieres responder está bien.

– Tch.

Tn suspiró ante la negativa de su compañero.

– No te obligaré a hablarme si no quieres. Pero...no te preocupes –sonrió.– Lo estás haciendo bien, de seguro ganarás el oro.

Tras decir esto, Tn regresó a la pista de patinaje, dejando a un sonrojado Yuri mirándola, embobado.

– Ah~ Lo sabía, te gusta esa chica –dijo Mila.

Yuri sacudió la cabeza y la miró molesto.

– ¡Que te calles, bruja! –gritó más sonrojado.

Mila rió.

– Si te gusta intenta hablar con ella sin ser tan gruñón. Ella tiene 15 años también, y es soltera...aunque no creo que por mucho, tiene muchos admiradores –rió guiñándole el ojo.

Mila se fue antes de que Yuri comenzara a protestar. El rubio miró hacia la pista, a aquella castaña que patinaba con paz, moviéndose con gracia bajo las miradas atentas y las sonrisas de Lilia y Yakov; Yuri se sonrojó.

– Bien hecho –la felicitó Yakov.

– Es esplendido –dijo Lilia.

Tn salió de la pista una vez más y le sonrió a Yuri cuando él entró, haciéndolo sonrojar y voltear la mirada, ocultando su sonrojo.
Mientras Yuri practicaba, Tn hablaba con Mila.

– ¿Qué opinas de Yuri?

– Es buen patinador...pero gruñón –ambas rieron.

– Lo es, sí. Pero... ¿Crees que es lindo?

– ¿L-Lindo? –tartamudeó sonrojada.– ¿Po-Por qué...preguntas eso?

– Curiosidad –rió.

– ¿Curiosidad?

– Necesita una novia. ¿Qué dices?

– ¿Po-Po-Por qué me lo preguntas a mí?

– Uhm bueno, tienes su edad y eso...harían linda pareja.

– ...Yo...estoy casada con el patinaje... –susurró, ocultando su sonrojo.

– Hm, entiendo. Bien, lo intenté –rió.– Por cierto, felicidades por clasificar.

– Gracias –sonrió.

Tras el entrenamiento, Tn y Yuri se cambiaron de ropa y salieron del lugar juntos a sus coach.

– Lilia, debo ir a hacer unas cosas, iré luego a tu casa.

– ...De acuerdo. No regreses tarde.

– Sí, señora.

– Yuri, acompáñala –dijo Yakov.

– ¿Eh? ¿Yo por qué?

– No, no, no es necesario. No quiero obligar a Yuri a hacer algo que no quiere.

– Ten cuidado entonces.

– Claro –sonrió.

Ice Queen ❄ Yuri PlisetskyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora