Me encontraba atrapado de nuevo, en medio de las cuatro paredes de una habitación sentado justo en frente de quien tenía lo que restaba de mi vida en sus manos. Su café humeaba fuera de la taza blanca. Blanco. De nuevo ese color me perseguía solo que ahora no tenía escapatoria, yo mismo me había metido en este lío.
Tomó la taza de café ente sus manos y dio un pequeño sorbo, la depositó en un movimiento tan lento que parecía que el mundo se estaba deteniendo algunos instantes, me estaba desesperando y él no podía notarlo. Era tan parecido a su hijo, notando mi existencia pero aparentando que yo no existo. Revisó entre los papeles hasta encontrar mi expediente, sacó el lapicero de la bolsa que se encontraba en el lado derecho de su camisa y comenzó a escribir antes de hacer la pregunta crucial de este caso.
-Dígame, señor Park, usted- hizo una pausa y tragó un poco de saliva -¿Sabe usted por qué está acá?
Levanté mis hombros con indiferencia, por supuesto sabía porque me encontraba en ese lugar, ellos me había encontrado segundos después de lo que había hecho. Al parecer era muy difícil para él estar entrevistando a la persona que le había quitado a su hijo.
-Jimin, ¿tú lo mataste?- preguntó mientras aflojaba el primer botón de su camisa -¿Lo mataste?
Quería contestar con la verdad, pero mi vida estuvo plagadas con mentiras, ¿por qué debería ser honesto en estos momentos? Levanté mis hombros despreocupado y negué con mi cabeza. De nuevo estaba atrapado en una mentira.
ESTÁS LEYENDO
Praeda 《JiKook》
Fiksi PenggemarJungkook no sabía las consecuencias de rechazar a alguien como Park Jimin, ahora se había convertido en una presa más de su juego.