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BUENO, HOLA… ME LLAMO MIKA Y LES TRAIGO UNA HISTORIA QUE TENGO INSMISCUIDA EN LA CABEZA, ESPERO QUE LES GUSTE ESTE CROSSOVER, SIN MAS COMENCEMOS.

No soy dueña de Dragón Ball Z INUYASHA son propiedad de AKIRA TORIYAMA RUMIKO TAKAHASHI.

FACEBOOK: FanFiction Mikashimota Z

MoonWalker/Otaku/Jacksonera- Invincible.

PD: Perdón por si tengo errores de ortografía.

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Que tanto se podría ocultar en las montañas, que cosas podría ocultar ese monte que desde hace años no había noticias. Una mujer de cabellos negros y tez blanca oculta entre un par de cuevas al fondo del monte Paoz, observaba detenidamente un cristal en su mano derecha, este desprendía luz y le iluminaba el rostro, sus hermosos ojos azules entre cerrados, confirmaban lo mucho que en algún momento llego a demostrar cariño y respeto, ahora solo es odio y rencor y este profanaban esa hermosa vista.

espero terminar esto pronto, ya me estoy hartando— la mujer quería acabar lo que había tardado tantos años, tanto tiempo agobiándole la espalda, solo tenia un cometido y esperaba pronto cumplirlo. Pero mas que nadie, sabia que no seria fácil, por eso tantos años de espera y aun le faltaban un par de mas, necesitaba ayuda, pero en sus condiciones solo podía contar con ella misma, por eso el cristal, con el comenzaría a buscar las fichas para su ajedrez, ya tenia bastantes pero le faltaba unos peones, los caballos y aun mas importante, su rey.

Las luces se intecificaron hasta traerle la imagen de un chico pelinegro con cabellos alborotados, tez clara y de fuerte contextura, el chico de ojos ónix con una sonrisa intachable y mas aun por sobretodo su gran poder le llamo la tención.

—¿Quién mas que tu eh…?— la sonrisa que estaba en sus labios rojizos la hacia ver mas bella, el viento corrió y con el un escalofrió subió desde sus pies hasta su cabeza, sus ojos perdieron esa elegancia expandiéndose todo lo que les era posible, se mantuvo así por unos instantes hasta que su ceño se frunció, mordió su mejilla y en seguida se obligo a buscar la fuente de ese arrebato. Cinco minutos fueron suficientes para dar con la fuerte de su angustia.

Ahí estaba, esa chiquilla que siempre odio y que nunca dejaría de odiar, ella que le arrebato todo por lo que había soñado, ella que la redujo a lo que era. ¡ELLA! que… su mano se detuvo estando apunto de tocar la imagen de la joven, la detallo mas de cerca y fue ahí donde todo cambio ¡se había confundido! no era la misma joven estúpida de ese tiempo, tenia parecido pero sin duda no tenia nada que ver con ella.

Pero aun así no era idiota, sabia que esa presencia tan parecida tenia que exterminarla, no volvería a correr riesgos como aquella vez, en esta ocasión aria las cosas bien, sin fallas y mucho menos arrebatos. Y por que no, podría desquitarse de unas cuantas, no lo sentía fuera o no, necesitaba, anhelaba sacarse un par de espinas y esa chica había sido escogida precisamente para eso.

—lo siento por ti cariño— que cinismo el de sus palabras, toco la imagen de la chica pelinegra y en seguida se oculto entre las penumbras que ahora llamaba hogar.

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¿Qué había hecho ella para estar pagan eso ahora? El amor de toda su vida, el hombre que siempre quiso, sin mas ahora perdido en ese sueño, su ser hecho añicos, cuanto quisiera que todo ese fuera mentira, que ese dolor solo fuera creado por un sueño de mal gusto, como los que en algún momento tuvo en su infancia. Recostada en la cama, abrazada a esa almohada que aun tenia su olor, que aun permanecía tibia aun que no fuera así, por que la vida era injusta y precisamente ahora que había decidido cambiar, que había decidido entenderlo, apoyarlo como desde un principio tuvo que haber hecho, pero que no lo hizo por simple arrogancia.

Ahora que lo necesitaba mas que nada, el se iba y decidía no volver dejándola a ella y a su hijo solos. "mamita, ya no llores… papá ya no esta… él se sacrifico en la pelea contra cell" oh por Dios, esas palabras la mortificaban día y noche, no importaba cuanto tiempo halla pasado, el dolor permanecía latente y mas aun el hecho de que el no quisiera regresar… ¿tanto la podría odiar? ¿tan incomodo se sentía junto a ella? ¡NO! El se lo demostró días antes del fatídico día, y ahí estaba la razón, posos su mano en su vientre ya no tan plano. Preciso todo eso vinó a pasar cuando ella menos lo necesitaba, si Goku al menos fuera sabido de su estado… ¿abría cambiado de opinión? No lo sabia, pero una cosa se había prometido esa mañana.

—No llorare mas, te daré el hogar y el amor que no le día a él, haré que se sienta orgulloso de mi otra vez…— un par de lagrimas rodaron nuevamente, pero ella al igual que él era una mujer de palabra y la cumpliría, se forzó a limpiarse los ojos con las manos. Su hijo no debía verla así, se había vuelto muy sobreprotector con ella desde que supo de su estado. "¡Tendré un hermanito!" la algarabía que había formado casi la deja a ella y su padre sordos, pero quien no por esa noticia la culpa se iba disipando y solo les quedaba ah ambos seguir y darle un lugar al futuro integrante.

7 Años Después

Después de tanto tiempo el dolor había sanado y con ello el amor y cariño había vuelto, ahora sus dos retoños compartiendo juntos en la mesa, esperando con ansias la comida que le tenia preparada, cada plato único y tan delicioso que ni el mejor buffet podría comparársele, uno de sus dones era la cocina ¿Por qué desaprovecharla si le iba tan bien? Sonriente les sirvió los platos a sus hijos alistando la mesa, se sentó con ellos mirándolos embelesada, amaba verlos así, tan a gusto con sus creaciones y si que se los demostraban.

Tardo mas ella en llegar a la mitad de la cena cuando ellos ya había acabado y desocupado cada plato. Sin duda un apetito voraz muy pocos acostumbrados a saciarlo.

—estuvo delicioso—ambos chico se sobaban la panza y relamían los labios por la grata comida ya consumida.

—me alegra que les halla gustado—tan feliz como hace años de costumbre, recogió los trastes dejándolos en el lavado, una de sus costumbres era dejar la cocina despejada y mientras lavaba poder admirar el paisaje, la principio se asustaba con uno que otro animal, pero al final se terminaba acostumbrando o el animal iba directo a su olla.

Diviso el bosque que no muy lejos se comenzaba a formar, la luna en alto indicando lo tarde que era y el viento hablándole cada vez que soplaba.

Un calambre cruzo por su columna y como resultado uno de los platos cayo al suelo, parpadeo y en seguida recogió los restos, cuando los hubo desechado de nuevo ese calambre que le ponía rígida la espalda, el miedo surgió desde sus entrañas, poniéndole la piel de gallina, los vellos del cuello se erizaron y sus ojos fueron a parar al bosque donde busco la sensación eh intento ubicarla, pero nada encontró, miro a su alrededor y sintió como algo la envolviese.

tranquila... — frunció el ceño, su respiración se acelero y de nuevo su vista fue a parar al bosque.

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BUENO, HASTA AQUÍ ESTE CAPITULO, DIGAMOS QUE ES COMO LA INTRODUCCION, ESPERO LES HAYA GUSTADO. ¡BYE!

PD: Para quiénes me siguen se darán cuenta que estoy subiendo mis historias de FanFiction a esta plataforma..
Espero no les moleste. Bye.

Mika-Chan

Vuelve La Venganza Del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora