Capítulo 50.

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Alexander

Debido a que Lucas no tenía nada grabe lo habían dado de álta al tercer día y lo tenían capturado en la cárcel de Nueva York.

Todo parecía marchar bien..
El maldito perro había tocado fondo por completo y jamas podría estar cerca de nuestras vidas...

Mi Sarah se recuperaraba poco a poco
Pero aun no le podíamos revelar que esperaba un bebe pues cualquier noticia fuerte podría causarle un malestar o daño...

La madre de Sarah casi me aniquila cuando le confesé el embarazo y lloro incansablemente...
Jonathan por su parte se puso muy feliz y grito por los pasillos que seria tío...

Sarah había pasado a un cuarto más grande el cual decidí rodear de flores y peluches...
Quería que se sintiera en casa...

Sarah

Todo esto era muy extraño... había pasado todo tan rápido..
De un segundo a otro ya no estaba encerrada en casa de Lucas pero en un Hospital..
Era todo muy repentino para mi...

Supuestamente ya me encontraba bien, en unos cuantos días me dejarían ir y podría ser libre de nuevo...

Entre los planes de Alexander y yo estaba vivir de nuevo juntos y casarnos como una linda pareja felíz..

Sin embargo, aunque todo marchaba bién sentía que algo me estaban ocultando...
Tenia un presentimiento extraño y además tenía muchas sensaciones diferentes en el vientre Cómo un presentimiento...

"Sarah? Estas despierta?"
Escuché a Alexander adentrarse a la habitación...

Traía consigo un enorme ramo de rosas y una pequeña bolsita de regalo...

Sonreí tiernamente y me senté en la cama...

"Piensas terminar con todo un bosque para ponerlo en mi habitación?" Dije sonriendo y haciendo referencia a todas las flores que me rodeaban...

Se sonrojo y frunció el seño...

"Cómo te has sentido?" Pregunto tiernamente sentándose junto a mi...

"Mal! Quiero salir! Sentir el sol! Oler el exterior y ser libre de este lugar!" Refunfuñe desesperada...

Sonrió levemente y negó con la cabeza en signo de burla...

"Puede haber pasado una manada de elefantes sobre tí y aun estarías dando lata como una pequeña niña..."

Frunci el seño y cruce mis brazos..

"Eres tan tierna cuando haces eso..." murmuró feliz...

"Alexander..." Dije algo timida...

"Si?" Respondió curioso..

"Gracias por salvarme... te extrañé..."

Me miró con un poco de sorpresa en sus ojos y sonrió de lado a lado...

"Sabes que nunca te hubiese dejado en brazos de ese imbecil...
Te lo dije antes...
ERES MIA!"

Sonreí con felicidad y lo abrace...

"Extraño sentir tu piel..." susurro en mi oido... "Extraño estar dentro de ti..."

Me miró directo a los ojos y me besó con fuerza...

"Eres y siempre seras mía..."

Asentí con la cabeza y bese su frente en aceptacion...

"Y tu eres mio..."

Me miró algo confuso y después hecho una pequeña carcajada...

"Ja! Algún día lo dirias... ya era hora..."

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