Capítulo 31.

7.6K 414 7
                                    

😍😍😍😍😍😍😍

Sarah

Alexander se comportaba de una manera muy distinta, me era difícil creer que fuera cierto, que todo esto fuera verdad.

Sentí un hormigueo en el estomago mientras el curaba mi labio.

"Tienes hambre?" Pregunto sacandome de mis pensamientos

"Si..." Dije mientras me quejaba de la cortada.

"Que quisieras cenar?" Pregunto con una sonrisa.

"Pizza.." Dije sonriente.

"Pizza??" Pregunto extrañado

"Que hay de malo en eso?"

"No no nada sólo que es raro que una mujer quiera pizza..."

"Pues no se a que clase de mujeres estabas acostumbrado pero a mi me encanta la comida chatarra.." murmure simple

Me miro con una sonrisa curiosa..

"Bien.. ordenamos pizza"

Sonreí feliz y me dirigí a la habitación, este vestido me estaba matando..

Me sentía extraña, no es que fuera una persona fría y dura de corazón pero que Alexander fuera amigable conmigo y me tratará bien me hacía sentir rara, me gustaba claro, pero tenía miedo que todo esto fuera mentira, después de todo lo que me hizo me era difícil creer que estuviera siendo honesto conmigo.

Alexander entró a la habitación mientras yo quitaba mi vestido y se quedó paradao mirándome con deseo...
Mis mejillas comenzaron a arder, y recordé cuando dijo que sentía un gran deseo de tocarme y sentirme.

No sabía como reaccionar ante este tipo de situaciones pues nunca había tenido encuentros amorosos con un hombre a esepcion cuando Alexander abusaba de mi pero eso no cuenta o si?

"Te quedarás ahí mirando? O mejor vendrás a ayudarme porque esta cosa no quiere bajar.." Dije intentando reducir la tencion del momento.

Alexander sonrió y se acercó a mi y en un momento ya estaba el ciper abajo y mi espalda descubierta.

Aunque Alexander ya había visto mi cuerpo miles de veces no podía evitar sentir pena pues no estaba acostumbrada a estas cosas por lo que me puse como un tomate.

Alexander acariciaba mi espalda y bajaba lentamente mi vestido.
Yo me sentía muy extraña, nerviosa y un poco asustada.

Alexander comenzó a besar mis hombros y lentamente bajar por mi espalda mientras removia mi vestido por completo.

Llegó a mi espalda baja con sus besos y luego me voltio para estar de frente, comenzó a besar mi abdomen haciendo que mi piel se enchinara y luego subió lentamente por el centró de mis pechos hasta llegar a mi cuello.

Intente resistirme un poco porque el nerviosismo idiotiza a las personas.. ya saben.. pero me tomó de la nuca haciendo ese movimiento que enamora.. recargo su frente en la mía y cerró sus ojos.

"Se que eh hecho esto muchas veces sin tu consentimiento y de verdad te pido que me perdones. Pero esta noche te suplico que me permitas hacerte mia de la manera correcta."

Me quedé paralizada ante sus palabras y sólo acenti con la cabeza lentamente.

"Prometo no lastimarte esta vez mi niña. Seré cuidadoso."

Sonreí nerviosa y beso mis labios con una dulzura y ternura inexplicable.

Me estremesi un poco al sentir sus labios en mi cuello y sus manos pasando lentamente por mi espalda y mi cintura y luego mis caderas.
Alexander me tomó fuerte entre sus brazos y me recosto en la cama con cuidado.
Removió las últimas briagas que cubrían mi cuerpo dejándome totalmente desnuda.

Eres Mia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora