Antes de morir

5.-No algo, alguien.

Recuerdo que me preguntaba ¿Por cuanto tiempo estuve inconciente? Todo mi cuerpo comenzaba a doler, pero nada que no fuera  aguantable. Estaba aturdido y cuando intente abrir los ojos la poca luz que emitia la camioneta me cegaba.

-Dios mio, ¿Estas bien? Pero que pregunta tan tonta, ¿Puedes oirme?-Escuche al lado de mi, y logre distinguir una figura que se movia de un lado a otro, sabia que era una mujer, pero no puedo abrir los ojos. A lo lejos escuchaba las sirenas de la ambulancia, que cada vez eran mas fuertes. Es como cuando recien te levantas, que tienes mucho sueño y tus ojos luchan por cerrarse, asi me sentía en ese momento. Cuando menos me di cuenta ya estaba en la camilla, comencé a recuperar mi vista, y lo unico que vi fue mi camioneta estampada contra la pared, en ese momento hubiera preferido que no me salvara, pero si lo hizo. Y le estare eternamente agradecido.
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Desperte en el hospital confundido, sentia ardor en algunos puntos y dolor en otros. Pero era como estar flotando, me sentia en las nubes al mismo tiempo. Cuandi abri los ojos estaba acostado, el cuarto estaba oscuro. Pero el olor me confirmo que era un cuarto de hospital, yo tenia puesta una bata, con sangre, sangre seca. Pero no estaba solo. Uno pensaría que el que esta ahí con tigo es tu papa o tu mama, durmiendo en el sillon, esperando a verte despierto.  Pero no. Si habia alguien en el sillon, una chica.
Una chica morena, que dormia comodamente con el cabello corto y alborotado, los zapatos manchados de lodo, y las facciones relajadas, se notaba que no era una chica echa de hueso, aun que tampoco estaba pasada de peso, tal vez ligeramente arriba de lo normal. Llevaba unos pantalones rotos de las rodillas y una blusa de manga larga que tenia manchas le lodo en las mangas.
Jamas la habia visto en mi vida. Tal vez es una chica loca que se escapo de un psiquiatra y le dio sueño. O una enfermera tratando de descansar. ¿Yo que se? Pero habia algo que me hacía sentir tranquilo de ella. Respiraba tan pacíficamente que podría pasar horas escuchandolo. Estaba muy debil para hablarle o siquiera para pensar en que hacia ahi, mis ojos comenzaban . Asi que solo decidi esperar a que se hiciera de dia, o a que mi cuerpo despertara.

-¿Troy?-Una voz masculina que no habia escuchado antes-¿Me escuchas?-Poco a poco comence a abrir los ojos, y primero me cego la luz de la lampara del hospital, pero luego comenze a divisar dos figuras que me veian parados a los lados de la camilla.
Mi papa y un doctor.
Mi papa con su cara de: estas en problemas
Y el doctor con cara de: que imbécil.
-Okay troy, te explicaré. Yo no se como saliste casi ileso de ese choque. No tienes fracturas ni nada grave, solo unos cuantos raspones, y golpes, asi que el cuerpo va a dolerte durante un tiempo, aun que si no tomas una semana de reposo sin esfuerzo como caminar mucho tiempo o cargar cosas pesadas va a empeorar. yo me preocuparía mas por lo que va a hacerte tu papa-Dice el doctor quitándose los guantes de latex y dejandolos a un lado. Chocar un auto siendo menor de edad y sin licencia, es algo grave. Ire a llenar unos papeles y podras irte de aqui-Dice y sale de la habitacion, dejandome solo con mi padre.
-Estoy decepcionado Troy.-Me dijo el.
-No hubiera pasado nada de esto si no estuvieras molestando. ¿Ire a la carcel?-A este punto ¿Que mas da?
-No hijo, pague tu multa, pero ya no tienes camioneta.-Dice serio...no mames.
-¡No puedes quitarmela!-Le dije enojado
-Ya lo hice.
-Pudrete.-El me dice unas cuantas cosas mas pero no lo escucho. Por lo menos me quedaba la bicicleta, pero no era lo mismo.
-Y estas castigado-me dijo mi papa sentándose en el sillon que estaba al lado de la camilla.
¿Habre soñado? Pensé. No podia a
Definir si habia sido una alicinacion o si realmente estaba alli. Le hubiera echo a mi papa un millon de preguntas, pero no podia ni verlo.
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Durante el resto de la semana no hice nada interesante. Simplemente tenia que tener una semana de reposo asi que eso no fue tan malo, aun que si fue un poco aburrido. Por que James tenia escuela y no podia venir a verme. Hasta que llego el fin de semana. El vino a mi cuarto el sabado a primera hora con videojuegos en mano. Comenzamos a jugar hasta que nos dio hambre y ordenamos pizza.

-La pizza esta aqui-Dijo james cerrando la puerta de mi habitacion con una caja de pizza en la mano. La puso en la cama y la abrio. Su olor me golpeo instantáneamente, y no dude en tomar el primer pedazo y comenzar a comer.
-Oye james, necesito contarte algo-le dije acordándome de la chica del hospital. La verdad es que no me habia acordado de ella. Hasta ahorita. James permanecío callado mirandome con atencion-El dia del accidente...yo...tu...¿Sabes como llegue al hospital?-le pregunte, no queria soltarle de repente la pregunta.
-Pues...alguien te reporto-Respondio con indiferencia, era obvio que iban a reportar una accidente asi.
-Pero ¿Sabes quien?-insisti
-Alguien anonimo creo, ¿importa?
-Es solo que, recuerdo haber esquivado algo.
-¿Algo?-Esta vez he captado su total atención
-Alguien....no lo se, tenia forma de persona, pero estaba distraído, no lo recuerdo bien.
-Tal vez estabas drogado-Me dijo burlón
-No no es asi, esa noche fue muy extraña. Desperte en el hospital de madrugada, estaba muy debil. Pero estoy seguro que en el sillon del cuarto habia alguien...una chica.
-¿Una chica? No lo creo Troy. Estabas cedado.-James no me creia
-James te digo que se lo que vi. Si estaba cedado. Pero ella estaba ahi, dormida. En serio. Tienes que creerme.
-Bien hermano, te creo-Nos quedamos callados un momento ambos-¿era guapa?-pregunto. Yo solo me rei, que idiota.
-No lo se, estaba cedado.-le respondi
La verdad es que que yo recuerde no era hermosa. Pero no era fea. De todos modos tenia algo que llamo mi atención. ¿Como no? Era una desconocida dormida en mi habitacion. Obvio iba a captar mi atención.