Capitulo 32: El cambio

1K 87 21
                                    

- ¿Y bien? Pregunto Tsukishima

- ¿A que te refieres? Respondió Kageyama

- ¿Ya invitaste a Hinata al baile?

- ¿Haaa? No-no me molestes no tengo por que hacerlo...

- Como que no... 

- Pu-pues es obvio... que Hinata iría conmigo... ¿no?

- Vaya sigues siendo un idiota...

- HAAAAAAAA QUE DIJISTE...

- Cálmate es solo un cumplido

- Agh no tengo por que escu...

- Espera... 

- Que es lo que quieres tengo que ir a clases...

- Tienes que hacerle la invitación a Hinata 

-...

- Se que es obvio que iría contigo y que tampoco te rechazaría pero debes hacerle sentir que te importa mucho...

-...

Kageyama no dijo nada solo siguió en silencio a su ultima clase del día pensando en lo que dijo el rubio y buscando un papel arrugado de su bolsillo con un lápiz y lo puso en su escritorio y recostándose en sobre su mano seguía escribiendo y murmurando "Tsk ya lo se cuatro ojos" 

Aquel papel ya estaba muy arrugado habían pasado días desde que había sido arrancado del cuaderno d notas y tenia muchos tachones y borrones entre sus lineas era un repaso que Kageyama preparaba para Hinata 

"Hinata, quiero que vengas conmigo como  pareja.... no, no, no eso no... Mejor : Quisiera que vengas conmigo al... no, no suena como una orden... Hinata, te gustaría ir conmigo al baile?... "

- Ahh... llevo días practicando que decirle a Hinata...

- TOBIO-KUN

- AHHHHHH... TORPE HINATA ME ASUSTASTE 

- EHH pero si solo vine a verte... tenemos que ir al club... Recuerdas nuestra practica?

- Ehhh ya acabo mi clase?

- Claro... pasaste distraído? Debió ser por estar dibujando déjame ver ...

- AHHH NO PARA NADA

- Ehhh ¿Por que no? Dibujas mal?

- EHH QUE DIJI...

- Bien, bien no te enojes solo quería echar un vistazo... 

-Pero no importa ¿Nos vamos?

-Pero no importa ¿Nos vamos?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Mmmm... Si, Sho-chan

Durante el entrenamiento Kageyama observaba a Hinata, y comenzó a darse cuenta en lo mucho que había crecido en estos tres años que llevaba conociéndolo.

¿Quieres ir al baile conmigo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora