Capítulo 4 Y que duela

4.5K 248 15
                                    



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Viernes 23:42


La fiesta estaba siendo una locura, definitivamente William sabía organizar buenas fiestas. La música era una mezcla entre actual y viejos éxitos de nuestra infancia en remix lo que ocasionaba infinitos gritos de júbilo.


Eva y yo habíamos estado con el resto de las chicas pero habían desaparecido en una zona del salón bailando mientras nosotras habíamos estado de grupo en grupo de chicos seduciéndolos simplemente en busca de alcohol.


Había perdido la cuenta de los cubanos y chupitos que llevábamos al séptimo de ellos y había olvidado cada uno de los nombres y caras de los chicos que nos los habían dado.

En ese instante estábamos con dos chicos castaños que debían de ser unos 4 o 5 años más mayores que nosotras riendo de cada cosa que decían mientras nos servían otro cubata.


-¿Has visto a Chris? -Me pregunta Eva entre el gentío.


-La perdí de vista hace rato. Debe de estar con Vilde y Sana.


-No me refiero a esa Chris, sino a ese Chris. -Dice señalando directamente con su dedo hacia la otra pared del salón.


Miro hacia allí para descubrirlo apoyado en la pared, con una cerveza en su mano mientras me mira fijamente. Había tenido la suerte de no cruzármelo en toda la fiesta. Había tanta gente que era fácil no ser consciente de quien esta a tu alrededor y digamos que el alcohol ingerido hasta el momento ayudaba bastante.


-No había tenido el placer. Gracias por decírmelo. -Le Sonrío con ironía y ella ríe fuertemente mientras se tambalea en su lugar.


-Tía eres una amargada. -Dice riendo todavía y presa del alcohol río junto a ella exageradamente perdiendo también mi equilibro hasta el punto que uno de los chicos que están con nosotras tiene que ayudarme a tenerme en pie.


-Cuidado preciosa. -Dice risueño y yo, ayudándome de él, vuelvo a coger equilibro.


Miro de nuevo hacia Chris que me observa ahora con su ceño fruncido y lo que puedo notar bastante cabreado. En un rápido movimiento agarra a una de las chicas rubias que bailan frente a él y empieza a besarla. Así sin más, algo que yo he hecho alguna vez y que en cualquier situación me daría completamente igual pero que lo haga él solo me hace reír.

Gamer's SKAM (Chris Schistad y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora