☆ The Freak Show☆

Capitulo 6

☆Meto☆

¿Desde cuándo. . Tengo esa sensación de vacío? . .

Siempre me valí bien por mi mismo, tras la muerte de mis padres, estuve en numerosos orfanatos. . Escape de la mayoría. . Aprendí a sobrevivir, a comer lo primero que encontrara. Gracias a eso fui capturado y llevado a tierras lejanas. . Fui vendido como un objeto, pero no me importo.

¿Por qué? Por qué ella estaba ahí, desde el primer día en que la vi podía sentir esa química, esa necesidad. . Necesitaba estar con ella. . Yo sabía que ella sentía lo mismo, lo supe por como me miraba.

Gracias a mi amor por ella fui tachado del "perro faldero" "la mascota de la consentida del amo." Aún así no me importo. . Sólo la quería a ella. . Quería una vida con ella.

Me hacia sentir tan vivo. . Tan lleno. . ¿Por qué ahora. . Me siento tan vacío.? Cierto. . Por qué la he perdido, para siempre.

Esa noche debí impedirle cualquier cosa, debí abrazarla, besarla. . ¡Algo! Debí quedarme con ella y de ser necesario. . Morir con ella.

Fui débil, a la hora de ver esa casa en llamas me aterre, aún así entre, busque en su interior a Luciela, aún así. . Sólo pude salvar ese oso de peluche que ella me había regalado.

Soy tan patético. .

Gracias a eso la perdí, para siempre.

Desde entonces tengo pesadillas, todas las noches la veo alejarse de mi y desaparecer entre las llamas, puedo escucharla gritar de dolor y agonía. . ¡Debí salvarla! O sólo morir en el intento. .

Intente seguir sus últimas palabras. . Hacer mi vida de nuevo. Como pude, volví a mi país natal, ahí tuve mucho que hacer, tuve diversos trabajos de todo tipo, pero al final, logre volverme el baterista de una modesta banda poco reconocida, eso dio pie a que un largo tiempo más tarde pudiera formar parte de algo más grande. . Si, de Mejibray.

Ahora era el baterista de esa banda, nos iba bastante bien y para mi esos tres chicos eran como mi familia.

—Entonces. . Tsu ¿cómo esta Himeri?.— Pregunto entre risas ese chico de cabello rosado, el bajista, Koichi.

—Insoportable, el embarazo la hace tener demasiados antojos, a cada rato es "tráeme esto." "También aquello." Y yo que me quejaba por lo poco que comía.— Respondió Tsuzuku, el vocalista.— Pero saliéndonos del tema ¿van bien los preparativos de la boda?.—

Tanto MiA el guitarrista de la banda como yo miramos a Koichi, pues era el quien estaba a punto de casarse.

—No me quejó, Yu. . Se hace cargo del arreglo de su vestido, también dijo que confeccionaría mi traje, tengo miedo de lo que haga.— Koichi rio.

—Ah, ustedes y sus vidas amorosas.— Soltó MiA, curiosamente el era el único que no compartía sus historias románticas con nosotros, aún así sospechábamos que tenía "alguien" en su vida.

—Deja de ser tan envidioso, algún día tu también te enamorarás y tendrás a alguien, MiA.— Dijo Tsuzuku.

—Prefiero a mis gatos.— Respondió MiA tras hacer una mueca, después me miro.— Hablando de vida amorosa. . ¿Qué paso con esa chica? ¿Ya dejo de enviarte mensajes?.—

Me encogí de hombros, si había o mejor dicho tenía una novia. . Pero ella no era nada comparado a Luciela. . Ninguna mujer podía compararse con mi primer amor, por eso todas me aburrían a la semana, y sólo comenzaba a ignorarlas hasta que ellas por su cuenta dejaban de insistirme.

—Si, creo que ya se aburrió de insistir.— Respondí.

—En verdad que eres cruel con las mujeres, Meto. . Tienes a la pobre chica sufriendo por ti.— Dijo Koichi.