Capitulo 11 [Final]

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Me quede con el. Finalice mi trabajo en el cirque con la última función en Tokio. Después de eso, me despedí de todo lo que conocí por años.

Fui a vivir con Meto. El en ningún momento me ha decepcionado... Parecíamos niños nuevamente entre juegos risas y travesuras.

Los días a su lado pasaban tan rápido que antes de darme cuenta, ya había pasado todo un año.

—Me siento gorda.— Susurre, me vi con ese vestido de novia por quinta vez. Estaba bien maquillada y arreglada, pues hoy era el día de mi boda.

—No estas gorda, estas preñada.— Soltó la esposa de Tsuzuku, Himeri.

En todo este año me había vuelto muy unida con las esposas de los compañeros de banda de Meto, pero aún así, no olvidaba para nada a mis viejos amigos, mejor dicho. Mi familia.

Xiu, estaba aquí junto a Chris. Quien sería el que me llevaría al altar.

Suspire al estar frente al espejo, mire esa panza de cuatro meses apenas, me sentía feliz por ello, pero hacia que mi vestido no entrara como debiera.

—Menos mal que lo hiciste ajustable.—

—Lo diseñe perfecto para esa pansita.~— Dijo la esposa de Koichi, Yuuki.

—Tu también deberías tener bebés ¿sabes?.— Dijo Himeri, la chica de coloridos cabellos, negó.

—Dentro de cuatro años. Sólo de ver a tu hijo y su hiperactividad me da escalosfrios.—

Himeri sonrió.— Diselo a su padre, a el ya le saco canas y arrugas. Se parece tanto a el.— Suspiro.

Reí sutilmente, entonces Chris entro por la puerta.

—Ya es la hora..—

Asenti con nerviosismo y camine hacia el. Chris me ofreció su brazo y así comenzamos a caminar.

—Nunca me imagine que me pedirías algo así a mi.— Soltó entre risas.

—Durante todos estos años.. Tu fuiste como mi padre.. Por eso quería darte el honor.—

—¿Por eso te robaste mi apellido? .— Me pregunto.

Sonreí.— Luciela Pohl. Suena bastante bien, me gusta más que mi otro apellido.—

El suspiro.— Ah, cállate, me harás llorar mocosa.—

—Chris..—

—¿Si?.—

—Gracias por todo.—

Llegamos a donde sería la ceremonia y comenzó la marcha nupcial. Desde ahí al final del pasillo podía ver a Meto esperarme en el altar con una sonrisa.

Camine lentamente hacia el, sin apartar mi mirada de su rostro. Al estar cerca el me ofreció su mano, yo la acepte con gusto, apreté está mientras que el cura comenzaba con su típico discurso. Creo que no fui capaz de escuchar una sola palabra, siempre mire a Meto, me perdía en sus ojos brillantes, el tiempo pareció detenerse unos segundos antes de que pudiéramos decir nuestros votos.

—Luciela Pohl. ¿Acepta usted a Meto para amarlo, respetarlo hasta que la muerte los separe?.—

—Acepto.—

"Hasta que la muerte nos separe.. Y la eternidad nos una nuevamente.. Hasta el fin de los tiempos.. Por qué el.. Es mi destino, en esta vida y en las que vendrán."。

[Fin]

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