El rincón del unicornio.

Cómo afrontar la Selectividad/Reválida

Tanto la LOE como la LOMCE han afectado de manera negativa el sistema educativo, formándonos desde el principio a conseguir un puesto directivo o a ser mano de obra barata. Sin embargo, una etapa muy dura por la cual ha pasado todo estudiante es la famosa Prueba de Acceso a la Universidad, con la cual dependía su futuro, ya que, tras obtener un resultado mínimo, escogía un grado universitario o superior que le determinaba su profesión y su vida. 

Yo hice la antigua PAU, puesto que mi generación fue la última en pasar por este horrible examen, aunque no sé qué será para los primeros en estrenar la PEBAU. Lo que sí puedo decir, es que realmente, no es como te lo pintan y, por ello, voy a nombrar las realidades que te puedes encontrar y los profesores no han querido decírtelo. Pero aquí, yo te voy a decir todo lo que me ha pasado el año pasado, cuando me preparé para la PAU.

1. El estrés es por abultamiento de la materia en poco tiempo. Es más, son los profesores quienes meten toda la angustia hacia el alumnado, ya que en realidad, el examen en sí tiene unos contenidos mínimos (puede haber excepciones como nos pasó a nosotros con todos los de Ciencias) y no merece la pena que te mates porque si has estudiado bien, lo vas a aprobar seguro. Mi consejo es que no te fíes de los profesores porque ellos no saben controlarse y hacen lo posible para poder infringirnos miedo (sí, si hubiese ido a  varios repasos de química y matemáticas hubiese suspendido Selectividad, pero fui lista y no fui porque sabía muy bien que ambas profesoras metían miedo y gritaban como locas). 

En realidad, da tiempo explicar una materia en 7-8 meses, pero es culpa de los profesores porque no saben dar bien una clase, sino que muchos de ellos disfrutan suspendiendo a los alumnos para estresarnos y hacernos recuperar la materia en septiembre (yo lo pasé fatal con mates, en serio, casi me estaba tirando de los pelos todos los días). Moraleja: no hacer caso a los comentarios de los profesores.

2. Los contenidos del examen son mínimos. ¿Para qué se estresan los profesores? Para nada. Cuando entré a hacer el primer examen de Selectividad, Lengua y Literatura, me sorprendí al ver que era justo uno de los que hicimos en clase. Yo llevé esto con calma y os aseguro que me dio tiempo terminarlo (eran 90 minutos). Además, en mi caso, conseguí sacar muy buena nota. Hay algunas excepciones, como pasó con Química, pero fue culpa de la organización, además de que la gente venía con un estrés impresionante.

3. Da tiempo, tranquilos. El examen consta de 90 minutos, por lo que da tiempo terminarlo en la mayoría de los casos. Lo malo es que los descansos entre dos exámenes son muy escasos y muy pocos profesores saben ponerse en la piel de los alumnos y mucho menos apoyarlos. ¿Acaso recuerdan su época de estudiante? No lo creo, si están más estresados.

4. Joden más los propios profesores que los del tribunal de la PAU. No sólo es estrés, sino que a algunos de ellos les encanta suspender a los alumnos por diversión. Lo malo, es que te dicen que te van a ayudar, que van a hacer todo lo posible para que saques buena nota... Mentira. Sinceramente, a no ser que estés enchufado o se te dé muy bien una asignatura, te joden vivo y luego, normal que vengan los lloros y los enfados. No es normal estar noches enteras en vela, teniendo en cuenta que te ponen exámenes cada semana como poco y luego, se divierten fastidiando a sus alumnos, para hacerles reprobar Bachillerato.

Me acuerdo el año pasado que me pegué noches enteras estudiando, pero no pude aprobar mates hasta mayo. ¿Por qué? Porque nuestra profesora, a parte de no explicar bien en clase ni preguntar las dudas correspondientes (es más, ni existíamos para ella), nos ponía exámenes de carrera que duraban dos horas y nos obligaba a hacerlos en menos de 40 minutos. Luego, suspendíamos casi toda la clase, pero era porque no entendimos la materia. Esa fue una de las razones principales por las que me metí a una carrera de letras y ahora lo que hago es sacarle el dedo corazón (la verdad es que hasta el año pasado quería hacer ciencias, pero me di cuenta de que no eran lo mío y me gustaban más las letras, por lo que quise hacer Periodismo y luego me metí en Derecho). Por suerte, todas las asignaturas de letras las aprobé con sobresaliente, y las de Ciencias no bajé del notable. Sólo mates pasó con un 5 pelado, pero bueno, así me libré de la Selectividad cuanto antes.

5. Organiza tus estudios. Hazte apuntes a mano en el caso de las asignaturas de letras y haz ejercicios de más en las asignaturas de ciencias. En caso de no entender nada y tu profesor no te hace caso, búscate algún repaso para que te ayude. En mi caso, me ayudó muchísimo para aprobar mates y, respecto a lo demás, pues hice lo que os digo. Aunque tengáis la sensación de no recordar nada, la verdad es que viene solo. Eso sí, estudia durante el día y, durante la noche, descansa unas 6-7 horas. Eso sí, nunca pases la noche en vela que será peor. 

En el próximo apartado, os hablaré de cómo va el sistema educativo en España y qué es lo que realmente llamamos educación, puesto que es increíble que la legislación del Gobierno pueda recortarnos este derecho fundamental a todos los ciudadanos. Sé que esto no os debe interesar porque no es literatura, pero afecta tanto a los colegios concertados (los más beneficiados), los institutos públicos e incluso a las Universidades. Sí, en el siguiente apartado os voy a comentar qué mierdas es lo que ha hecho la LOMCE y lo voy a comparar con las mierdas que la LOE llevó haciendo durante varios años. ¿Alguien sirve para qué sirven los colegios realmente?