De nuevo, lágrimas.
Lágrimas rodaban por mis mejillas, se deslizaban hasta mi cuello y se perdían en mi cuerpo.
Dolía, recuerdo que dolía.
Todo.
Salí de mi habitación, eran las 3:47 am.
Observé a mi hermana en la cama del otro lado de mi cama, mi madre en su habitación, y mi padre en la sala; todos estaban dormidos.
Cada uno estaba soñando, estaban en otro mundo del cual yo no tenía conocimiento.
Pero... Estan tranquilos.
Recuerdo un día cuando fuimos a un parque con toda nuestra familia, no puedo decir que fue mi día perfecto. Pero me sentía tranquila, feliz y en paz.
Mi hermana estaba conversando con mi madre; mi padre estaba con mis tíos y algunos primos, y yo me encontraba lejos, estaba descansando, escuchando mi música; pero dí media vuelta y los observé a todos conviviendo, riendo, jugando, realmente me sentí tranquila.
Fue la mejor sensación, hasta ahora, que he sentido.
Abrí la puerta para salir al patio, coloqué la escalera y subí al techo de mi casa y observé.
Observé como el mundo dormía y seguía despierto a la vez.
Observé las luces de las casas, de las calles, las estrellas.
Observé la Luna, era tan grande y tan brillante.
Que el miedo se desvaneció y me sentí tranquila.
Me sentí libre.
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Siempre serás tú
Teen FictionEsta es la historia de Nina. Si quieres saber cuál es, quédate. Ella es una chica que quiere tener un amor como en los cuentos de hadas. Pero esto es la realidad, no existe. Su vida está hecha mierda, pero no podría ser peor. ¿O si?