Día Cuatro

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Héctor se ah quedado un día más en mi casa al parecer no recuerda nada de ayer, salió al patio a distraerse, un buen momento para ver la videocinta que dejó aquel hombre.
La cinta muestra que alguien está grabando dentro de la escuela, los pasillos, salones pero todo está vacío es de noche, hay varias X en cada escritorio en donde estarían las personas anotadas en aquella lista, pero al parecer muestra dibujos de asesinatos o algo parecido, creo que piensa matar a todos en la lista debo impedir y saber cómo lo hará, Héctor no tiene que saber nada pues no creo que pueda tras lo que le ha pasado.
Héctor ••• Hola, que estás ocultando?
Víctor ••• Nada.
Héctor ••• Seguro? Déjame ver.
Víctor ••• No, espera.
Héctor se percata de la cinta y decide verla, no comprende lo que hay en ella.
Héctor ••• Victor dime que lo de ayer no fue real.
Víctor ••• Sí, todo fue real.
Héctor ••• Maldición !! Creí que era un sueño y no te quería contar nada.
Víctor ••• Descuida, ahora que sabes que es verdad, debemos evitar que todo esto pasé.
Héctor ••• Pero cómo? Sí no sabemos exactamente lo que hará.
Víctor ••• No, pero tenemos los días en los que lo hará y cada una de las personas anotadas en la lista.
Héctor ••• Y crees que no lo va a evitar?
Víctor ••• No lo creo, sí no lo hubiera hecho desde ayer.
Héctor ••• Tienes razón, debemos evitar todo lo que pase.
Hay algo más que tenga que ver?
Víctor ••• Una carta que dejó.
En ese momento le enseño la carta, la lee y pregunta.
Héctor ••• Como sabe tú nombre ??
Víctor ••• No lo entiendo.
Héctor ••• Y si desde un principio estuvo destinado que pasara todo esto, ya sabes aquel hombre, la maleta, la lista, la carta y la cinta.
Víctor ••• Tiene razón pero con que propósito, hay que averiguarlo Héctor.
Ese día en la noche estuvimos vigilando pero el no aparecía por ninguna parte, decidimos descansar pues nada ocurriría.
Estábamos equivocados alguien tocaba la puerta nos despertamos pero ninguno de los dos se atrevía a abrir la puerta, esperamos a que se fuera era el obviamente aquel hombre, al ir se nos dirigimos a la puerta había otra carta, esta vez se dirigía a Héctor.
La carta decía;
Hola Amigo Héctor, Debo Decir Que Me Sorprende Que Aún Con Miedo Te Animes A Ayudar A Mi Amigo Víctor, Tienes Tanto Miedo Y Temor Por Lo Que Viene Que Puedo Olerlo Y Saber Que Pronto Serás Mío.
Ese día Héctor no podía dormir, no me explicaba porque él, le mandaría una carta así, no le hemos hecho nada y además la mía no decía nada de eso.
No se que hacer, todo es confuso espero encontrar respuestas pronto, debo saber quién es ese sujeto aquel hombre que nos perseguirá o por lo mientras estos días.

Aquel HombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora