Magical Hunt

Capítulo 18: El tiempo límite

Ivy

- Hasta que por fin solo queda la mitad - Dijo mirando varias pantallas a su alrededor que cambiaban de imagen rápidamente. - Ya me estaba haciendo vieja esperando a que se mataran. Tal parece que ya puedo poner en marcha la última fase del juego - Dijo mientras todas las pantallas se apagaban. - Aún me acuerdo la vez que viví esto como si hubiera sido ayer - Sonrió. - Como si hubiera sido ayer... - Repitió nostálgica. - Ya es hora - Dijo reincorporándose. 

Caminó por un largo pasillo color azul y que con cada pisaba tenía el efecto del agua hacia un pequeño cuarto totalmente negro, al terminar el pasillo la gran habitación negra se tiñó en un color blanco cegador en el cual solo había una mesa que le llegaba a poco más de la cintura y en él un panel lleno de botones diferentes, cada uno con algo diferente escrito. Terremoto, tsunami, plaga y demás desastres con los cuáles dificultaría el juego para las participantes. En el panel resaltaba un botón rojo mas grande que los demás. - Jamas llegué a pensar en este día, el día en el que mi tiempo como diosa acabaría - Oprimió el botón. - Fue tan efímero... Volveré a ser la diosa - Dijo con un rostro malicioso. - ¿Cierto? - Le dijo a la joven ubicada detrás de ella, que solo se mantenía de pie por la mera avaricia de la Diosa. - Tu ganarás por mí - Le dijo acercándose. Al llegar a ella le acarició los largos cabellos blancos y se fijó en la mirada perdida de la joven.

 - Cierto - Pronuncio la joven sin conciencia alguna con la mirada perdida en el botón rojo.

"Recta final"

- Esto me trae tantos recuerdos - Dijo la Diosa mientras se separaba de la joven. - Yo estuve ahí una vez - Contaba. - En ese entonces ser Diosa sonaba tan bien, pero luego te das cuenta que como todo, tienes un tiempo límite - Su mirada se torno oscura. - Deberían decírtelo antes de ganar el maldito juego - Apretó su puño al punto que su mano comenzó a sangrar, sin embargo ésta sanó inmediatamente. - Ni siquiera te dicen cuanto tiempo es, solo te dicen que acabará y desaparecerás para siempre - 

Su mirada se llenó de determinación y miró a la joven. - Es por eso que te salvé de la muerte, tú serás la nueva yo, la nueva Ivy - La Diosa aún no estaba segura de por qué escogió ese nombre al llegar a ser la Diosa y haber creado su propio mundo, de todas las posibilidades. - Mi juego fue muy diferente al de ellas, ¿Sabes? - Siguió. - Éramos 12, pero también habían hombres - Dijo al tiempo que su mirada caía al suelo y una lágrima se desbordaba por su mejilla.

...

- Camille - Dijo una voz masculina a la joven que lo miraba mientras lloraba.

- No... No mueras por favor, dijimos que ganaríamos ambos - Dijo arrodillándose al lado del joven. - Me lo prometiste, ¡Me prometiste que crearíamos un nuevo mundo juntos! - Su voz desgarradora hizo que el joven comenzara a llorar. - ¡Ya maté al último! ¡Solo quedamos nosotros dos! - Dijo mientras de sus manos comenzó a salir un brillo cegador y luego se formaban dos manoplas llenas de sangre.

- Me alegra que tu seas la ganadora - Dijo el joven mientras la miraba orgulloso. - Tu mundo será mejor que el que cualquiera hubiera podido crear - 

Los dos finalistas se encontraban en las escaleras de la enorme pirámide donde el ganador recibiría la corona que la permitiría crear un nuevo mundo. A su alrededor, dos cuerpos, un hombre y una mujer que querían ganar. Al lado del hombre yacía una katana ensangrentada y de la mujer un cuchillo de cazador partido en dos. Al lado del joven moribundo había una larga guadaña en la que se reflejaban las lágrimas de Camille.