24.- Busan.

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Desesperado, Yoongi volvió a marcar el número de NamJoon por quinta vez. Sin embargo nunca obtuvo respuesta. En vano, esperaron un par de horas más por la llegada de la pareja, desistiendo cuando se dieron cuenta que ya era demasiado tarde.

Los chicos llegaron a la casa de Jimin sin contratiempo, esperando que tal vez el peliplata y su novio estarían en el sitio pues Jimin les había enviado la dirección del hogar de sus abuelos para que más tarde no se les complicara trasladar sus pertenencias y poder llegar sin problemas. Los 5 chicos, incluído JungKook estaban realmente preocupados. El día estaba próximo a terminar y el par no se dignaba en aparecer.

Yoongi bufo molesto, era claro que estaban en total desventaja, si es que a caso querían buscar a su amigos en el hotel, pues nunca se habían molestado por preguntar algo tan simple como el nombre del lugar en donde los chicos se hospedaban.

El día terminó y una nueva esperanza surco en el pequeño grupo ¿Tal vez NamJoon y Jin habían decidido aprovechar su último día de hospedaje y llegarian sin falta el día siguiente? Eso sí que era factible. Satisfechos con su descubrimiento,  se fueron  a acostar cada uno pensando en el regaño que les darían al par.

Taehyung abrazó a Hoseok hundiendo su cabeza en el pecho del mayor, por su parte Jimin y Yoongi disfrutaban del jacuzzi que tenían los abuelos en su gigantesco baño. JungKook se acostó pensando en la posibilidad de poder conquistar a la hermana de su amigo y como haría que la chica se olvidará de NamJoon. El primer día en Busan había sido demasiado tedioso, pues para Yoongi y Hoseok, si NamJoon no estaba no les sería posible divertirse, mientras que para Jimin y Taehyung, si sus parejas estaban desanimadas, por ende, ellos tampoco estarían felices. Y por último, JungKook, quien simplemente se encontraba ensimismado en los sentimientos que guardaba por la chica.

Al día siguiente, la situación no cambió mucho. NamJoon y Jin jamás llegaron a la casa de los abuelos, e incluso cuando los chicos se pusieron en marcha hacía la casa de JungKook para conocer al padre del menor,  regresando muy tarde, muy tarde a la casa de los abuelos Park, ilusionados con escuchar la voz de sus amigos. Ellos jamás aparecieron.

Y no fue hasta entonces que comprendieron que NamJoon jamás se reuniría con el grupo, tomando el atrevimiento de culpar a Jin, pues tal vez el chico no quería que los frecuentará. Sin embargo, Taehyung frenó de lleno todas sus sospechas mal intencionadas, pues argumentó que su hyung no era para nada ese tipo de persona, que al contrario Jin era demasiado bueno y que tal vez la cosa sería más grande.

Yoongi miró a Hoseok y asintió dándole la razón al menor, sintiéndose de inmediato tan estúpidos e irracionales. Total mente desconcertados, pues NamJoon jamás había hecho algo como eso, logrando que de pronto la situación se tornara demasiado extraña.

Hoseok tomó su móvil para llamar a NamJoon una vez más, marcando el número como un desesperado. Y en cuanto el aparato comenzó a sonar, el tiempo para el pelinegro se detuvo, en espera a que su amigo respondiera.

No fue así.

— ¿Tal vez deberíamos regresar? — Jimin miró a sus amigos, mordiéndose el labio.   —Puede que hayan regresado a Seúl.

  — ¿Se habrán enojado por qué hemos venido sin invitación? — Taehyung abrazó a Hoseok intentando retener las infinitas ganas que tenía de llorar.

— NamJoon no es ese tipo de persona. — Yoongi miró a su novio y le sonrió, tratando de darle al joven alguna clase de consuelo.

— Tampoco Jin hyung. — Arrepintiendose por su tan erróneo comentario. Taehyung  miró a sus amigos y afirmó con fuerza. — Es por eso que estoy tan preocupado.

Closet |NamJin BTS|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora