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La noche siguiente, recordó que su fin de semana largo iba a terminar y que al día siguiente debería ir a la escuela. Las otras veces se iba a la cama temprano porque su mamá lo obligaba, y ésta vez no era así. Aún así, Mike sentía la intriga correrle por las venas, pensando que al día siguiente tendría la oportunidad de preguntarle a su amigo qué le pasaba, conteniéndose de saltar de emoción. Emoción y adrenalina que se desvanecen al recordar que su amigo está triste.

Entonces, como no tiene nada más en qué pensar, se autoplantea la duda de si su mejor amigo está triste por un desamor. Quizás la chica que le gusta ni sabe que él existe. O quizás sí, pero lo ignora. Tal vez le gusta alguien y ese alguien tiene pareja, o no se atreve a declarársele. Tal vez se sienta mal porque nadie se le ha declarado o nadie se fija en él.

Mike sonríe al recordar esa época en la que se había obsesionado con tener una novia, pero no encontraba a nadie que le gustase. Miró al techo con melancolía, pues él estaba así de desesperado porque sentía que nadie lo tomaba en cuenta. Quizás por la mente de Jeremy se repetía el "Si yo muriese, a nadie le importaría". Y eso entristecía increíblemente al ojiazul, ya que él se preocupaba mucho por su mejor amigo.

Él ya no quiere pensar en cosas tristes, así que se voltea, abraza a su almohada y suspira, vaciando su mente. Trató de enfocarse en lo que pensó al principio, el tema del desamor y las desilusiones que éste trae.

Por un momento creyó que a su amigo podría gustarle Doll, como a todos los babosos de su salón, pero no lo vió posible, ya que Jeremy siempre se quejaba de lo arrogante y estúpida que le parecía la rubia. Siguió pensando en los posibles intereses amorosos del ojiverde, pero ninguno le convencía. Jeremy aparentaba odiar a todos sus compañeros de curso.
Mike se repitió a sí mismo que no era sólo un compañero de Jeremy. Mike es su mejor amigo, se conocen desde la primaria. Al recordar su larga amistad con el castaño se convence de que si a Jeremy le gustara alguien, ya se lo habría dicho.
Luego de repensarlo un par de segundos más, lo afirma.

Jeremy no confía en nadie más que su mejor amigo. O por lo menos eso cree su mejor amigo.

Preocupación - jeremikeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora