Con La Muerte En El Bolsillo

(03:21 pm)

Noa llega a su casa. Al parecer su madre no se encuentra.
Sube las escaleras y se dirige a su habitación, cierra la puerta y se tumba en su cama. Siente unas enormes ganas de llorar y de no querer vivir más.

*Flash Back*
Sus padres discuten de nuevo y el pequeño noa presencia la discusión sin que ellos se den cuenta.
–¡¿Ahora estás feliz?!- Grita el hombre a la mujer.
–¡Realmente contigo jamás he sido feliz!
–Bien si es así, ¿Por qué no te largas?
–Estás loco si piensas echarme de mi casa.
–¿Tu casa?, ¡Estás loca mujer!
–Quiero el divorcio. ¡Ya quiero que me dejes en paz! –Dice la mujer y estalla en llanto.
–Bien, pero Noa vendrá conmigo te guste o no. –Dice el hombre molesto.
–A ti jamás te ha importado noa, jamás lo has querido.
–¡Noa es mi hijo y se irá conmigo! –Responde el hombre furioso.
–¿Ya has olvidado que cuando era un bebé me obligaste a regalarlo? –Dice la mujer llorando.
–Rebeca, eso fue hace tiempo... Eramos unos adolescentes ¡por dios!
–¡No dejaré que me apartes de Noa! –Dice molesta la mujer.
*Fin del flash Back*

Noa se reprocha con los recuerdos. El imaginar que tal vez nunca fue deseado y que el hecho de haber nacido fue la causa de muchos problemas.
–Tanto les importo que querían abandonarme... ¡Vaya que amor de padres! –Dice noa molesto.

*Suena el timbre*
–Diablos, ¿ahora quién? –Piensa.
El chico se levanta y baja las escaleras en caminó a la puerta principal.
Abre la puerta y ve a sus dos amigos.
Parece ser que no se ven tan alegres de verlo y Noa mucho menos.
–Hola Noa. -Saluda David cuando ve a su amigo.
–Hola David, ¿qué hacen aquí? –Pregunta en tono indiferente.
–¿No vas a invitarnos a pasar? –Pregunta Lía en tono serio.