(07:49 pm)

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Noa despierta, al parecer se quedó dormido de tanto haber llorado tirado en el piso.
De inmediato al darse cuenta, el chico se levanta y ve la hora de su reloj de cabecera que tiene en el buró junto a su cama.
Rayos, dormí demasiado —piensa mientras se talla los ojos aún hinchados y rojos por el llanto.
El chico busca su mochila, la encuentra y en seguida se acerca al armario de dónde detrás de un montón de libros saca uno, lo ve y suspira. En seguida guarda el libro en la mochila y se la cuelga.
Se dirige al baño, abre el lavabo y moja su rostro un poco para tratar de despertar por completo. Se seca el rostro y trata de acomodar su cabello.
El chico baja las escaleras y sale de casa camino al parque.
Mientras camina, el chico piensa en sus amigos y en la forma en cómo se portó con ellos.
¿Se habrán molestado? —se pregunta el chico en su mente—. Pero es que ellos no entienden nada de lo que pasa.
El chico después de haber caminado un par de cuadras más, llega al parque dónde de inmediato busca con la vista una pequeña banca junto a un gran árbol.
Ve la banca vacía y apresura el paso para llegar a ella.
Al parecer esa banca para Noa tiene algo en particular a las demás bancas del parque.
Hola pequeña... —dice en voz baja al llegar frente a la banca—. Es bueno encontrarte sola.
El chico quita la mochila y se sienta en la banca. Saca de la mochila el libro: "Poesía Amorosa de Jaime Sabines", su libro favorito, el cuál le recordaba tanto a las cartas que solían escribirse Alisson y él.
El chico abre el libro y de inmediato recuerda.

*Flash Back*
Noa camina por el pasillo del colegio, cuando de pronto escucha un grito a lo lejos.
¡Heey, Noa! ¡Aguarda!
El chico se detiene y voltea hacía dónde venían los gritos.
Al voltear se da cuenta de que se trata de Lia, que al parecer no venía sola. Venia acompañada de una chica que le parecía conocida.
¿Tanta prisa, eh? -dice Lia mientras se acerca al chico.
No... lo que pasa es que tengo que llegar pronto a casa porque tengo proyectos pendientes. —dice mientras observa a la chica que se encontraba a un lado de su amiga.
Bueno, no importa. Vengo a presentarte a una nueva amiga mía, ¿te acuerdas de ella, Noa? Es Alisson, la chica nueva. —dice Lia mientras le guiña un ojo a su amigo.
...Ah, hola. —dice Noa algo nervioso y sorprendido.
Hola, Noa. Mucho gusto, mi nombre es Alisson. —Dice la chica muy entusiasmada.
—Un gusto, Alisson...
Lia se queda observando a ambos y de inmediato al notar que el chico está nervioso, interrumpe.
¿Ves? Te lo dije Alisson, Noa es un poco tímido con las chicas.
El chico al escuchar lo que dijo su amiga, se pone aún más nervioso y suelta una pequeña risa.
No te preocupes Noa, yo también solía ponerme bastante nerviosa con los chicos. Ya después se me pasó y ve, aquí estoy hablándote. —dice Alisson tratando de entrar un poco en confianza con el chico.
Bueno, Alisson, fue gusto conocerte pero me tengo que ir, chicas. Las veo luego. ¡Un gusto en conocerte Alisson! –Dice mientras hace una pequeña sonrisa y de inmediato se da media vuelta y se va.
*Fin del Flash Back*

Con La Muerte En El BolsilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora