Sin despertar

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Omnisciente.

Se despertó, más bien los ruidos provenientes de la cocina la despertaron. Se levantó de la cama, y se puso su bata. Bajó lentamente las escaleras y se dirigió a la cocina. El olor a quemado era muy grande.

-¿Qué ha pasado?-preguntó Anna apoyada contra el marco de la puerta de la cocina.

Ryan estaba preparando algo, que se le había quemado, y había humo por todas partes. Anna se acercó a él, y curioseó qué era lo que estaba cocinando. Pero no lo pudo adivinar.

-¿Qué era?-preguntó oliendo la sartén.

-Tortitas.-Anna se rió y Ryan frunció el ceño.-¿Qué pasa?

-¿No sabes hacer tortitas?

-Pues...-dijo mirando la cocina, llena de humo.-Por lo que parece, no.

Entonces Anna le arrebató la sartén, y cogió mantequilla, leche y harina.

-Ya las preparo yo.-dijo e indicó a Ryan que se sentase en una silla.

···

Beckett miró hacia la silla donde normalmente estaría sentado Ryan, que en ese instante estaba vacía.

-¿Dónde está tu compañero?-le preguntó a Espósito, quien pasaba por allí.

Este alzó los hombros, y se sentó en la silla de Ryan.

-No lo sé, pero lo que sí sé es que en esa discoteca, hay algunas personas que afirman que hubo una discusión acerca de las 11 y 2 de anoche.

-Seguramente, nuestro asesino discutió con Alex Santiago, nuestro cadáver. ¿Encontrásteis a su hermano?

-No,-Espo negó con la cabeza.-Joel no estaba en la discoteca.

Beckett torció la cabeza, mirando la pizarra de notas, y volvió a torcerla cuando se escucharon unas risas. Volvió la cabeza y vio se quedó sorprendida.

Ryan y Anna venían corriendo, con la ropa a medio poner, con prisa. Ryan se estaba atando la camisa, que la tenía por fuera, y Anna se estaba ajustando la camiseta. Espo les miró fijamente, y empezó a reir.

-Vaya, vaya, parece que a la parejita no les ha dado tiempo a vestirse.-comentó Castle, que venía por detrás de los dos, con dos cafés en la mano.

-No es lo que parece.-aseguró Anna, ya con la camiseta bien puesta. Espo le echó una mirada interrogativa, y la chica le fulminó con la suya.-Lo que ha pasado es que no ha sonado el despertador, lo sentimos.

-Bueno, sea como sea,-interrumpió Beckett.-tenemos que encontrar al hermano de nuestra víctima.

-Si, vamos.-dijo Ryan, cogiendo su chaqueta, y caminando hacia la salida.

···

-¿Podrías reconocer a la persona que te metió la droga en la copa?

-Sí.-afirmó Anna.

Empezaron a andar por la discoteca, y Anna miraba a todas partes.

-Es ese.-señaló con la mano a un chico moreno, de unos 23 años.

Beckett se acercó a él.

-Policía.

El chico se dio la vuelta sorprendido, y miró a Anna.

-Ah, ya sé de que va todo esto. Sí, yo le metí la droga a la chica, pero pensaba que querría divertirse un poco, no he hecho nada malo.

-Meter droga en la copa de otra persona sin su permiso sí es algo malo.-indicó Beckett.

El chaval agachó la cabeza, y se metió las manos en los bolsillos.

-Bueno, pues lo siento.

-No hemos venido por eso, ¿usted es Joel Santiago? El hermano de Alex Santiago.

-Sí, pero no sé que tiene que ver eso.

-Pues que tu hermano a muerto, y hay gente que afirma que hubo una discusión en este local antes de que él muriera.

-¿Creen que yo le maté?-Beckett iba a hablar, pero el chico siguió hablando.-Oigan, él era mi hermano, yo nunca le mataría.

-Pero sí discutiste con él, ¿por qué?

-Una chica le pilló metiendole la droga en la copa, ¿qué? Nos ganamos la vida con eso.

-¿Os ganáis la vida con eso?

-Sí, hay un pavo que nos paga por meter la droga en adolescentes, y esta chica,-dijo señalando a Anna.-se cruzó en mi camino, y yo sólo hize lo que tenía que hacer.

-¿Y qué pavo es?

-Oigan, yo no soy un chivato.-Beckett le lanzó una mirada fulminante.-Está bien, está bien, se llama...creo que Tom Crates.

-¿Tom Crates?-preguntó Anna sorprendida.

-Sí.

-¿Te suena ese nombre?

-Sí...es mi exnovio.

|| Secretos olvidados || ♦Castle♦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora